sábado, 15 de octubre de 2011

Aquí 43

Aquí
La Paz (Bolivia), nueva etapa, 15 de octubre de 2011 Año I No. 43
Afiliado a la Federación Latinoamericana de Periodistas, Felap
Editores: Remberto Cárdenas Morales y Yuri Aguilar Dávalos
http://www.semanarioaqui.com
Edición de homenaje a Pedro Moye Noza, niño fallecido accidentalmente el 21 de agosto de 2011 durante la VIII Marcha Indígena en defensa del TIPNIS.

Índice
editorial
Camino que destruya el TIPNIS o servicio real a los indígenas y al pueblo
De sábado a sábado (171)
Evo perdió el apoyo de todo el pueblo
Remberto Cárdenas Morales
El indio en el poder, esa idea
Gustavo Guzmán (análisis)
¿Es el fin del proceso de cambio?
Andrés Gómez Vela es periodista.
de nuestra tierra

Canciller de Bolivia habla sobre el TIPNIS, Goni y el litio

el TIPNIS
Pablo Solón le pide a Evo suspender definitivamente el camino que atraviese el TIPNIS*
Bolivia: carreteras y política
Jorge Gómez Barata
lucha de nuestros pueblos
Reflexiones del compañero Fidel:
Chávez, Evo y Obama
Primera parte
Fidel Castro Ruz
Chávez, Evo y Obama
Segunda parte y final
Fidel Castro Ruz
Por una falta no cometida
13 años de reclusión injusta contra los 5
Minerva Flores Torres
Carta abierta al presidente Barack Obama sobre René González y los cinco cubanos
por Arnold August
Por la libertad plena de René González y su regreso a Cuba
Bloqueo estadounidense provoca pérdidas millonarias a Cuba
O. Fonticoba Gener
derechos humanos
Por la defensa del TIPNIS y de la marcha
literatura
‘Los fundadores del alba’, un libro cada vez menos leído
Una mirada a la novela que ganó el premio Casa de Las Américas en 1967
La Razón, domingo, 2 de octubre de 2011
Ricardo Aguilar - La Paz
lecturas
Bolivia: el 18 brumario del Kananchiri
Por Rafael Bautista S.

editorial
Camino que destruya el TIPNIS o servicio real a los indígenas y al pueblo
Los gobernantes, luego de violar varios artículos de la Constitución Política, otras normas bolivianas y convenios internacionales (que también son leyes nuestras), con el propósito central de impedir que llegue a La Paz la VIII marcha indígena por la vida en el TIPNIS y para confrontar a los pobladores de esa reserva natural, con su mayoría de legisladores hizo aprobar la llamada ley corta. Esa norma, básicamente, dispone la suspensión de la construcción del camino de la discordia entre Villa Tunari (Cochabamba) y San Ignacio de Moxos (Beni) y la consulta a los que en primer lugar serían perjudicados con aquella vía, es decir, los que antes que la población boliviana sufrirían los efectos de la destrucción de aquella riqueza, única en su género en la geografía patria. Esa ley corta, además, “reconoce” otros derechos de los pueblos indígenas, lo que es una reiteración innecesaria de lo que determinan otras normas constitucionales, legales y convenios internacionales, así como se intenta enmendar un error con lo que, a la vez, se incurre en otra falla sustancial: el inicio de la obra en los tramos I y III sin la aprobación o el rechazo de los que viven en el TIPNIS, lo que un gobierno que se autodefine como del pueblo no debe hacer.
Efectivamente, son varios los derechos indígenas vulnerados por los gobernantes, en este último tiempo, pero, en esta nota editorial, nos concentramos en la consulta previa, de buena fe e informada y los relativos al territorio indígena.
La consulta a los pobladores del TIPNIS (y no a otros) debió realizarse antes de que Evo Morales tome la decisión unipersonal de la construcción de ese camino. Al revés, se consiguió el financiamiento, se firmó el convenio de construcción, se tramitó licencia ambiental para las dos puntas de la vía (la primera y la tercera) y extrañamente o como maniobra politiquera se dejó en suspenso el segundo tramo que, según el Presidente, debe atravesar el bosque que, además, es la reserva de agua dulce más importante de Bolivia, cuyas lluvias y vertientes tributan al río Mamoré, a otros ríos como el Madera y, por tanto, al Amazonas.
Luego de que se definió unir con ese camino las poblaciones citadas se inventó los tramos, como otra maniobra, quizá envolvente, para decirlo con esa desafortunada frase vicepresidencial. Más dañino para los intereses regionales, populares, plurinacionales y sobre todo indígenas fue que se prefirió la modalidad del contrato “llave en mano” que quiere decir, entre otras cosas, que la empresa brasilera OAS debe ejecutar todo el camino (sin convocatoria a propuestas), asimismo, el estudio previo para la construcción de la carretera, luego de que el Presidente —reitaramos— resolvió que se construyan más o menos 60 kilómetros que destruirían el bosque, lo que para el primer ciudadano es tan poco que no representaría (lo reitera sin ruborizarse) menos de 1.000 hectáreas deforestadas frente a las 45.000 que se talan cada año en otros sitios y nadie reclama, añade. Un camino, empero, liquida árboles, animales, agua, biodiversidad (recursos genéticos irremplazables).
Una respuesta fácil se puede formular con preguntas: ¿por qué un gobierno como el actual no combate, con la fuerza estatal, ese saqueo? ¿Espera un reclamo expreso? ¿El Presidente desconoce que en tantos otros bosques, distintos al TIPNIS, también hay una colonización espontánea que destruye la naturaleza y que su gobierno nada serio hace para impedirlo?
Al Presidente se le atribuye poseer un “olfato político bárbaro”, es decir, mucha intuición (mucho corazón y poca cabeza) que parece fallarle respecto del TIPNIS. Parece fallarle su olfato político porque ni siquiera él se escucha porque si se escuchara defendiera aquel territorio (como lo hacen los marchistas) y buscara que los originarios vivan en armonía con su territorio, con la madre tierra y así aseguraría que los bolivianos y latinoamericanos nos beneficiemos con los recursos biológicos de ese “bosque paradisíaco” que muchos otros han conocido y estudiado antes que el principal residente del Palacio Quemado, según confesó, al tiempo de culparse de no haber ido antes al TIPNIS.
Los gobernantes esperan que una mayoría de los dueños colectivos del TIPNIS dirían sí a la construcción del camino porque además creen que con la vía conseguirían el desarrollo occidental, contra el que despotrican los indigenistas que se niegan a sí mismos al proponer obra que nos enfrenta, en vez de que nos una y nos separa por intereses extraños a Bolivia y ajenos a los indígenas. Camino que partiría en dos el TIPNIS y que en 20 años acabaría con casi dos tercios de las riquezas que atesora, así como se sabe que la laguna “Bolivia” se ha secado en 20 años, es decir, en las dos décadas en las que los colonizadores, que plantan coca en 200.000 hectáreas, han depredado la extensión que integraba el TIPNIS por el sur. Ese es un ejemplo de lo que ocurriría con el hábitat natural de mojeños-trinitarios, chimanes y yuracarés con el camino de la discordia que partiría el corazón de la casa grande indígena.
“Los pueblos indígenas tienen derecho a la libre determinación. En virtud de ese derecho determinan libremente su condición política y persiguen libremente su desarrollo económico, social y cultural”, dice la Declaración de las NN.UU. sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y que es Ley de Bolivia del 7 de noviembre de 2007.
Sobre su territorio (el TIPNIS) esos pueblos tienen derecho a instalar su autogobierno, con sus costumbres como normas y del que seguirán usando las riquezas de ese suelo. Y con yapa: las riquezas del subsuelo son de todos los bolivianos, así como no tienen derecho a separarse territorialmente de Bolivia.
Y sobre la consulta a los originarios, hermanos nuestros, no sólo en las declaraciones: “Los Estados celebrarán consultas y cooperarán de buena fe con los pueblos indígenas interesados por medio de sus instituciones representativas antes de adoptar y aplicar medidas legislativas (Ley corta) o administrativas (camino por el medio de su territorio) que los afecten, a fin de obtener su consentimiento libre, previo e informado”. Leamos, también, el artículo 30, Inc. 15 de la CPE.
Sólo se necesita saber leer para entender un texto clarísimo como el citado que —ratificamos— es parte de la legalidad boliviana.
Los indígenas no quieren una “mamada” más de los gobernantes ni de Evo, como dijo un diputado originario. Ya no más “pachamamadas”, añaden otros, con pleno conocimiento.
Son esas las razones por las que los marchistas han rechazado la denominada Ley corta y se niegan a una consulta porque no sería ni libre, ni previa, ni informada, ni de buena fe.
Los sacrificados marchistas, como quienes caminan en vanguardia porque defienden intereses de veras regionales, populares y plurinacionales, exigen que jamás se construya un camino que parta en dos el TIPNIS. Y aunque los audaces, con mucho corazón y poca cabeza, lo ponen en duda, la defensa del TIPNIS es una causa de la mayoría del pueblo boliviano, en la que la derecha y los imperialistas no deben ocupar ningún espacio, como dirigentes sindicales se han encargado de manifestar a grito condigno, lo que tampoco escucha un Evo Morales que en la lucha por la tierra y por el territorio —lo esencial de este momento— se juega por los que quieren más tierra en propiedad personal y a costa de los bosques para plantar más coca.
Antes de la agenda que quiere discutir el Presidente con todos o con casi todos, en diciembre próximo, tiene que resolver el lío del TIPNIS mediante las alternativas que siguen: para los dueños de éste otro desarrollo porque es posible, sin camino que lo parta en dos, lo que sería servir a los indígenas, al pueblo y a la patria o camino de la discordia, lo que sería facilitar los planes de los postmodernos bandeirantes brasileños, de los empresarios criollos, de las petroleras y, en particular, de los colonizadores de los tiempos de Evo: invasores y depredadores, más voraces que sus abuelos y padres.

De sábado a sábado (171)
Evo perdió el apoyo de todo el pueblo
Remberto Cárdenas Morales*
Según los propagandistas del gobierno, el 12 de este mes, más de 500 mil compatriotas, en las calles y caminos de la patria, han manifestado su apoyo al Presidente, a la construcción del camino Villa Tunari-San Ignacio de Moxos (que atraviese el TIPNIS) y a la elección de jueces supremos. El Presidente, sin embargo, nada dijo expresamente respecto de las dos últimas consignas a los concentrados en La Paz.
Los 500 mil manifestantes, especialmente en la sede de gobierno, es una estimación discutible, que corresponde más a los deseos de los gobernantes que a la realidad.
En su discurso el Presidente otra vez mintió porque dijo que esos manifestantes reunidos en la plaza Villarroel (LP) fueron allí “voluntariamente” y “por su cuenta”. Los que militan en el MAS y los que apoyan los cambios (reformas que tienden a perder su contenido avanzado) y al gobierno estuvieron allí tal como afirmó el primer ciudadano boliviano.
Sin embargo, una parte considerable de los asistentes llegaron a esa plaza y pasearon por las calles paceñas sus intereses: los colonizadores porque pretenden más tierras en los bosques nacionales, especialmente en el TIPNIS, y para plantar coca; los cooperativistas mineros, en gratitud anticipada porque el gobierno los liberará, con una ley, del pago del impuesto al valor agregado, beneficio que alcanzará a los comercializadores de minerales; los gremiales, como otros sectores, a cambio de fichas con las que conseguirán migajas, como la ampliación de un puesto en un mercado; los empleados públicos (militantes del MAS y sin partido, como los del Banco Central de Bolivia), fueron obligados a manifestar so pena de perder el trabajo; a innumerables ciudadanos se los convocó bajo consignas distintas a las que se proclamó; a varios de los dependientes del gobierno y del Estado se les pidió dinero lo que no fue voluntario…
Especialmente en la concentración paceña se notó falta de fervor de los asistentes ante el discurso presidencial. Esta es una apreciación que compara el entusiasmo de los actuales parciales del Presidente, con los que antes eran muchos más y que manifestaban incluso fanatismo antes que convicciones o compromisos sustentados en ideas avanzadas.
Quizá el Presidente o los que le dicen verdades a éste hayan visto el comportamiento real de los manifestantes del miércoles 12 de este mes. Así como no deben dejar a un lado, como si nada significara, la reprobación de transeúntes que al menos les silbaron a los manifestantes de Evo. Para nosotros mejor que los “mirones” de marchas y concentraciones se hubieran comportado indiferentes porque entre la gente del gobierno hay quienes prefieren el odio a la indiferencia, como dice el vals peruano.
Un periodista que defiende al gobierno y al Presidente, cuando evaluó la marcha en La Paz, dijo, por televisión, dos detalles que se deben tomar en cuenta: que ante tanta gente en las calles paceñas no había necesidad de obligar a nadie para que asista a la demostración de fuerza y que el apoyo a Evo Morales, de acuerdo a demandas coreadas, no fue incondicional, que al primer ciudadano le pidieron enmendar errores y al gobierno que siga por un cauce de veras democrático y popular (además, antiimperialista y revolucionario consecuente).
Las omisiones del Presidente en su discurso dicen mucho. Según nuestro entender prefirió callar sobre el camino de la discordia quizá porque supo que entre los manifestantes hubo quienes, desde sus organizaciones sociales, dijeron que apoyan a los marchistas indígenas y que se debe respetar los derechos de aquéllos. Sobre las elecciones de jueces supremos, voceros de movimientos sociales dejaron constancia de su desacuerdo con el procedimiento que se siguió al nominar a los candidatos, varios de los cuales son del MAS y los que no lo son se comportarán funcionales a los gobernantes porque de éstos depende su elección. El Presidente, se supone, tiene que ser informado e debe informarse, todos los días, de lo que piensan y hacen los movimientos sociales, en particular, los que le son obedientes sin reservas.
Las concentraciones son para demostrar fuerza, para confirmar a los partidarios de los cambios, del gobierno y del Presidente. Todas las experiencias revolucionarias, sobre todo en momentos de crisis, deben realizar demostraciones públicas para confirmar a sus militantes y/o simpatizantes.
Una demostración de fuerza es para mostrar a los enemigos de los cambios, del gobierno y del Presidente que son superiores en cantidad y en calidad y que por ello pueden vencer en una transición boliviana en la que todavía sigue vigente: quién vence a quién.
Las marchas y las concentraciones, en particular la de La Paz, fueron para mandar mensajes fuera del país en un momento en el que Evo ya no puede decir que parece que en España lo quieren más que en Bolivia, como cuando en el país ibérico fue recibido y aclamado en una plaza de toros. Ese mensaje para la exportación consideran vital gobernantes y palaciegos en un momento en el que organizaciones indígenas de Nuestra América, en una reunión realizada en Brasil, ratificaron expresamente su apoyo a los marchistas que defienden al TIPNIS, así como a indígenas peruanos y brasileños que están enfrentados con similares enemigos que también se aprestan a depredar o ya lo hacen el hábitat natural de esos pueblos hermanos.
La concentración, también, tuvo como propósito recomponer fuerzas, reorganizarlas, reunificarlas, conseguir que reasuman ideas para los cambios, rescatar el apoyo internacional.
La propuesta presidencial para elaborar una nueva agenda con todos o casi todos (se supone que el Presidente convocó también a los “empresarios patriotas”) está en la dirección anotada, aunque no debe perderse de vista que la agenda de octubre sigue inconclusa, como aseguran alteños, especialmente.
El programa (lo que el Presidente llama agenda) debe ser de veras democrático, popular, antiimperialista y revolucionario para recuperar el curso avanzado del proceso del que somos actores o testigos, con un movimiento social y político que sólo excluya a los enemigos abiertos y encubiertos de la transición boliviana.
Y para enfrentar de veras a la derecha y al imperialismo, el gobierno tiene que abandonar prédicas y prácticas como el gasolinazo, el maltrato a los potosinos, muertes como la de los dos estudiantes de Caranavi, la violación de los derechos indígenas, como la de los marchistas de las tierras bajas.
La resolución del conflicto por el TIPNIS que favorezca a los indígenas y al pueblo y la aplicación de aquel programa o agenda impedirían que los cambios y el gobierno sigan cuesta abajo. Pero dudamos de que el Presidente dé pasos con botas de siete leguas porque cada día que pasa sin esos nuevos rumbos se aleja la posibilidad y la necesidad de que el gobierno y el proceso sigan por un camino del pueblo. Sólo entonces otras marchas serán de todo el pueblo como parte de la lucha para conseguir la segunda y definitiva independencia de Bolivia.
La Paz, 15 de octubre de 2011.
*Periodista

El indio en el poder, esa idea
Sostiene el autor que en las entrañas de la administración del poder en el actual proceso político actúa un curioso mecanismo: el “chantaje étnico-cultural”.
Y Fidel dijo: “El modelo cubano ya no nos funciona ni a nosotros”. Tamaño desparpajo, tamaño arranque de realismo y sinceridad política, sólo podía proceder de la boca del Comandante. Ocurrió en septiembre de 2010, en una entrevista concedida por el líder cubano a un periodista estadounidense (Jeffrey Goldberg, de la revista The Atlantic).
Un día después de que la frase recorriera el mundo, Fidel Castro, claro, dijo que fue malinterpretado, que lo que realmente no funciona es el capitalismo, pero nunca negó que fueron ésas sus palabras. Quien sí parece haberlo interpretado bien es su hermano Raúl.
Pocos meses después de la confesión de Fidel, en diciembre de 2010 y ante la Asamblea Nacional —el parlamento cubano—, Raúl Castro fue igual y dramáticamente sincero: "O rectificamos, o ya se acaba el tiempo de seguir bordeando el precipicio, nos hundimos, y hundiremos el esfuerzo de generaciones enteras".
La historia viene a cuento aquí, un poco por amenidad narrativa, otro tanto porque Cuba es, para muchos funcionarios del gobierno de Bolivia, una referencia de acción política incuestionable, y otro retazo más significativo porque hay ya suficiente evidencia que permite concluir que la revolución cubana, como la “democrática y cultural” de Bolivia, se merecen el desparpajo de Fidel: una alta dosis de realismo y honestidad (claro que, en el caso cubano, para tamaño desparpajo, se requieren medio siglo de Revolución y 85 años en el cuerpo).
La referencia a ese pasaje de la historia reciente de la Isla viene a cuento también para introducir una contribución más a una cada vez más necesaria radiografía sustantiva del actual proceso político en Bolivia. Y en esa línea, ya casi es innecesario apelar a un análisis de la gestión de gobierno en el ámbito de la economía (la gestión económica del gobierno se desnuda sin solicitud: el señor Vicepresidente, por ejemplo, en un texto de reciente publicación, y en tono agrio y majadero, propio de un hombre crispado, acaba de redondear con precisión los horizontes económicos del gobierno del MAS: desarrollismo del más “puro”, travestido de una retórica falaz, presuntamente leninista).
Resulta mucho más interesante y mucho más expresivo, entonces, remitirse a los aspectos psicológicos, ideológicos y culturales del actual proceso político, y entre ellos está, sin duda alguna, aquella poderosa idea que condensa todos esos aspectos: la idea del indio en el poder, la idea de que aquí, en Bolivia, gobiernan los indios, aquella idea que convoca, provoca, transforma, deforma, y hasta disuelve.
¡Cómo puede no ser poderosa esa idea —el indio en el poder—en un país profunda y genéticamente racista!, en un país forjado en el fallido intento de construirlo en base a la quinta parte de su población, excluyendo a una mayoría inapelable, los cuatro quintos de indios. Si esto es así, si se mira desde lejos y se admite que así han sucedido las cosas, lo que puede decirse con absoluta certeza hoy, sobre el curso del actual proceso político boliviano, es que ya no se es felizmente o tristemente impune en Bolivia cuando se vomitan esas tres palabras que resumen dolorosamente, todavía, el sentido común que le ha dado nombre a la República: “indio de mierda”.
Hoy, hay un país que se ha dotado de un nuevo estatuto —la Constitución Política del Estado— que le otorga a los indios un lugar indiscutible en la nación (en la plurinación, mejor dicho); hoy, ya resulta sencillamente inimaginable un país sin indios; hoy, el extraordinario poder simbólico de esa idea convertida en acción política se ha materializado en una suerte de rebelión electoral indígena. Somos un país más completo, más dispuesto a sus desafíos.
Pero somos también el país de las tristes paradojas. Aquella poderosa idea —el indio en el poder—ha derivado en algo que bien puede nombrarse como “chantaje étnico-cultural”, una suerte de resorte invisible que actúa desde la psicología culpable de los indios y no indios que navegan en los meandros de la administración del poder. De allí pues nacen las sombras del actual proceso, la auto-negación de sus actores en nombre de esa poderosa idea, las ya largas sombras de la indiscutible supremacía del líder, del incuestionable “jefazo”, del autoritarismo, la arrogancia y la prepotencia y todas sus oscuridades.
De allí mismo han nacido el “gasolinazo”, el desprecio a los que disienten, la ominosa y obscena genuflexión de la política a los milicos (milicos, sí, con todo el denuesto que la palabra conserva). La lista es larguísima, y la triste paradoja se enrosca todavía más en su más cruel y patética expresión: la servidumbre intelectual, la idea del indio en el poder y su paroxismo, diríamos.
Pero claro, las cosas de la vida y la política no se explican sólo por la psicología y los fracasos culturales. Hay al menos dos Evos en cuestión, para intentar explicar la citada servidumbre: el Evo de sus primeros cuatro años de gobierno, hasta el 2008, el incuestionable conductor de la “guerra” victoriosa sobre las oligarquías latifundistas del oriente, y el Evo nacido en 2009, con el verdadero inicio de la fase estatal del gobierno del MAS, que apenas dos años después ha comenzado a demostrar sus limitaciones, hasta el punto de configurar un muy probable punto de no retorno. Es ese primer Evo el que parece haber domesticado a todos quienes les rodean, convirtiendo sus oídos en rodillas.
Y si de tristes paradojas se trata, debe citarse la más reciente: hay unos “indios de primera” —los obedientes, los levanta manos, los dispuestos a todo, incluso a enfrentarse a sus “hermanos”—, y los otros indios, los “indios de segunda”, los que marchan en defensa de su territorio, los que resisten el desprecio.
Hay otro “gasolinazo” en curso, entonces. Sí, no es un absurdo comparar el fallido intento de “equilibrar” los precios de los hidrocarburos de diciembre de 2010 con la marcha por la defensa del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure, TIPNIS.
Ambos hechos revelan con absoluta claridad la desfiguración, el dislocamiento, o sencillamente el agotamiento del actual liderazgo del llamado “proceso de cambio”.
Son dos hechos cualitativamente semejantes, pero distintos en su densidad política: el “gasolinazo” se ha resuelto, temporal y rápidamente, con el retroceso del Ejecutivo; la forma en que se resuelva el conflicto que plantea la reedición de la marcha indígena, en cambio, no parece ser tan sencilla, todo indica que su resolución inaugurará un nuevo tiempo en el tiempo del “proceso de cambio”, un nuevo principio.
Y ya comienza a ser insoportable la levedad argumental de los múltiples y variopintos voceros del gobierno sobre el asunto. Les hace falta, compañeros, siquiera unos gramos de la honestidad política del Comandante, por ejemplo.
Gustavo Guzmán / Periodista

¿Es el fin del proceso de cambio?
10/09/2011
¿Cuándo acaba una revolución? Cuando sus postulados son traicionados por los líderes que conducen la rebelión. Se llega a este extremo cuando no se cumple lo que se dice, se anuncia o se escribe. Ejemplo, si en la Constitución se postula el Estado Plurinacional, comprendida como la convivencia pacífica y armónica entre diferentes naciones en un Estado, sin sobreponer intereses de una sobre otra y respetando formas de vida de sus habitantes, los revolucionarios deben cristalizar lo que han escrito en la vida real. Si no lo hacen, dejan de ser revolucionarios.
¿Cuándo termina un proceso de cambio? Cuando el líder circunstancial proclama al mundo que “los derechos de la Madre Tierra son más importantes que los derechos humanos”, reclama a los organismos internacionales aprobar los derechos de la Pachamama cuanto antes y grita a todo pulmón “Planeta o muerte”, pero llegado el momento de la prueba real, como en el caso del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), ni los derechos de la Madre Tierra ni los Derechos Humanos son más importantes que las aspiraciones de un privilegiado grupo y el capital transnacional que elige muerte y no planeta.
¿Cuándo acaba una revolución? Cuando se lucha durante décadas contra el poder abusivo, destructivo, excluyente, triturador de la moral de los pueblos más sojuzgados; sin embargo, cuando se llega a ese mismo despreciado poder se procede del mismo modo, con las mismas armas políticas, con iguales maquinarias mediáticas y se usa el mismo truculento lenguaje que usaban aquellos contra quienes se supone que pelearon para no escuchar ni sufrir más frases que salen como escupitajos de un aterrador desprecio, como el término “salvajes” usado por Francisco Roberto Pizarro Coraite contra las naciones mojeña, trinitaria y tsimán. Merece ser procesado por la ley contra el racismo.
¿Cuándo termina un proceso de cambio? Cuando se procede del mismo modo que los neoliberales a quienes se criticaba y se combatía por haber aprovechado el Gobierno y el Estado para beneficio suyo a través de leyes, decretos o reglamentos como lo hizo Gonzalo Sánchez de Lozada al formular un Código Minero en favor de su actividad o Hugo Banzer y su esposa al convertir la Aduana en una billetera personal.
Aquellos “luchadores” (a quienes no vimos por cierto enfrentarse a la represión neoliberal) ya aprobaron una ley de chutos para beneficiar a “sus bases” y están tentados de hacer lo mismo con la nueva ley de la coca.
¿Cuándo acaba una Revolución? Cuando el poder deja de ser un medio y se convierte en un fin maquiavélico y sus usurpadores se aferran con uñas y dientes para legar sus cargos a los hijos de sus hijos y a los nietos de sus nietos, como solían hacerlo aquellos contra quienes se hizo la revolución. He aquí el gran mal. Si cumplieran sólo en lo mínimo la cosmovisión andina de la rotación de cargos, no darían dádivas ni reproducirían beneficios ni tendrían mimados ni preferidos pensando sólo en las próximas elecciones.
¿Cuándo termina un proceso de cambio? Cuando los conductores de ella atentan contra el origen de su vida política o la cuna de sus sueños de poder; en resumen, cuando desconocen y olvidan quiénes los encumbraron en el cargo que ostentan ahora.
¿Cuándo acaba una Revolución? Cuando se gobierna desde las oficinas o un avión de 40 millones de dólares, inaugurando canchas de césped sintético, obras nimias y se pierde todo contacto con la vida real, entonces se dicta un gasolinazo o se cree que el país va bien.
Cuando se llega a este extremo, se hacen añicos los sueños colectivos de bienestar, entonces la revolución se convierte en restauración, no por el retorno de la oligarquía expulsada, sino por la reproducción de sus amañadas “prácticas”. Ergo, la revolución queda fuera y la contra-revolución, en el poder hasta que termine su periodo constitucional.
¿Es el fin del proceso de cambio? 
Andrés Gómez Vela es periodista.

de nuestra tierra

Canciller de Bolivia habla sobre el TIPNIS, Goni y el litio

FUENTE.-
http://latindispatch.com/2011/10/14/tipnis-goni-y-el-litio-del-salar-de-uyuni-entrevista-con-david-choquehuanca/
En la siguiente entrevista realizada el 20 de septiembre en la Misión Permanente de Bolivia ante las Naciones Unidas, el Canciller boliviano David Choquehuanca nos habla del pedido de extradición que su gobierno ha solicitado a los Estados Unidos, el futuro de las reservas de litio del salar de Uyuni y la marcha en defensa del TIPNIS que ha golpeado la popularidad de la administración de Evo Morales durante las últimas semanas.
Latin America News Dispatch (LAND): Queremos hablar en principio tres temas, primero un tema que creo que es de bastante interés para la comunidad latina aquí en Estados Unidos, sobre todo la boliviana. Tiene que ver con el fallo de la Corte Supreme de Justicia el 31 de agosto de este mismo año en contra de Gonzalo Sánchez de Losada y varios de sus colaboradores en el gobierno. Como usted debe conocer, después de ocho años de proceso legal, básicamente, se les ha condenado de culpables de genocidio. ¿Qué representa este fallo histórico? ¿Cómo lo ve usted?
David Choquehuanca (DC): Mira, los asesinatos tienen una condena de 30 años. Cuando uno en Bolivia comete un asesinato la condena es 30 años. Estos no sólo han cometido un asesinato, sino han muerto muchas personas. O sea, no solamente han atentado contra la vida de las personas, han atentado contra la vida de un país. Así que el fallo que conocemos nosotros no satisface a los familiares. No satisface a los alteños. No satisface a sus hijos, los que han quedado huérfanos…
A los compañeros, las familiares, el pueblo alteño, las organizaciones han dicho ‘el fallo es leve…’
Nosotros queremos llevar adelante —garantizando el debido proceso, ¿no?— en Bolivia queremos, simplemente queremos hacer justica. No puede ser que en este siglo puedan tener protección esas personas que cometen este tipo de actos, violación, crímenes de lesa humanidad, violación de todo tipo de derechos, no solamente de las personas, sino de todo un país…
LAND: ¿Y han pedido formalmente la extradición [del ex presidente Gonalo Sánchez de Losada, quien actualmente reside en Estados Unidos]?
DC: Hemos pedido formalmente, hemos pedido varias veces, hemos pedido audiencias con el Departamento de Justicia. Nosotros como Poder Ejecutivo, o sea, no somos los que tenemos que tramitar, o sea, respetamos la independencia de los poderes. Está en manos del poder judicial. Pero nosotros somos los vehículos en canalizar lo que trabaja el poder judicial…
LAND: Ahora, las relaciones bilaterales entre los Estados Unidos y Bolivia están un poco deterioradas. Usted cree que eso puede influir en que se dé o no la extradición de Gonzalo Sánchez de Losada? (…)
DC: La relación con Estados Unidos nunca ha sido fácil. Siempre ha sido una relación complicada con Estados Unidos. Les duele que hayamos expulsado a su embajador. Les duele que hayamos expulsado a la DEA [las siglas en inglés de la Aministración de Cumplimiento de Leyes sobre las Drogas]. El Presidente dice no, Estados Unidos, o sea, la DEA, hace el control del narcotráfico con fines políticos. Esto no ayuda a que podamos construir una relación sincera, una relación transparente con Estados Unidos. Nosotros queremos tener las mejores relaciones con todos los países del mundo, incluyendo Estados Unidos. (…)

El litio

LAND: Cambiando de tema, me gustaría conversar con usted sobre el litio y las enormes reservas —las más grandes del mundo, de hecho, se dice que más del 50 por ciento del litio sobre el planeta está bajo la costra salina del salar de Uyuni. Como tengo entendido, en el plan de industrialización del litio que ha propuesto el gobierno están basicamente planteadas tres fases. La primera, la construcción de la planta piloto. La segunda es la producción industrial del carbonato de litio y por último el proceso de industrialización, que vendría siendo la producción de baterías, etc. Siempre ha llamado la atención, creo que le ha llamado la atención a todo el mundo que en las primeras dos fases la consigna del Estado ha sido la consigna de 100 por ciento estatal, que se desarrolle con fondos del Estado. Y de hecho, creo que es un punto de honor para este proyecto. Usted cree que el Estado boliviano está preparado para asumir con plenitud lo que es considerado el proyecto económico y extractivista más importante de la historia de Bolivia? (…)
DC: Ahora, el salar de Uyuni no es de Evo Morales. El salar de Uyuni es de todos los bolivianos. No es de las transnacionales, es de nosotros. Y nosotros somos los que estamos trabajando para establecer alianzas estratégicas con empresas que nos ayuden y que permitan llevar adelante procesos de industrialización. (…)
Queremos nosotros dar mayores niveles de valor agregado en Bolivia. No queremos que se lo lleven nuestra materia prima hacia afuera. Necesitamos inversiones. Bolivia necesita inversiones. No tenemos tecnología. Pero queremos que la inversión venga acompañado de transferencia de teconología. Queremos una inversión que nos ayude a salir de la pobreza. No es que no ha habido inversión en Bolivia. Ha habido inversión en Bolivia. Pero esa inversión en el pasado nos ha vuelto pobres. (…)
LAND: Recientemente en la página de la Gerencia Nacional de Evaporíticos se publicaron por primera vez los memorándum de entendimiento que tiene Bolivia con Francia y usted mencionó Japón, Corea, Brasil, Irán, varios países. Y se entiende que hay un proceso de negociación bastante importante precisamente para buscar ese socio comercial. ¿Cuál cree usted, dentro de los candidatos, cuál se perfila como el más prometedor?
DC: Mira, dicen que el litio alcanza para todos. Podemos trabajar con los alemanes, podemos trabajar con los franceses. Podemos trabajar con los chinos. Podemos trabajar con los coreanos. Y ellos saben. Saben que se puede trabajar de esta forma. (…)
LAND: ¿Estaríamos hablando entonces de la posibilidad de que Bolivia se asocie con varios países para industrializar el litio, el carbonato de litio?
DC: Veremos. Estamos abiertos. A ver —por ahí hay una propuesta interesante. Tenemos que tomar la mejor opción, pero siempre pensando en los bolivianos. (…)
El Estado ha empezado a preocuparse por sus recursos naturales. Ya no están en subasta nuestros recursos naturales. Hay normas, hay leyes y se tiene que respetar esas normas, esas leyes, cualquier inversor. (…)

TIPNIS

LAND: ¿Cómo fue que se tomó la decisión, a nivel de Estado de ir hacia adelante con el proyecto de la carretera? Es decir, ¿qué fue lo que se evaluó? ¿Se hizo una evaluación de los posibles costos ambientales versus los beneficios de la carretera? ¿Cuáles fueron los elementos que se manipularon ahí, en esa discusión?
DC: El Presidente públicamente, en reunión de gabinete, reuniones de evaluaciones con las otras organizaciones, nos ha dicho ‘podemos cometer errores, pero jamás vamos a traicionar a nuestro pueblo.’ (…)
“La marcha sale en defensa de TIPNIS, en defensa del derecho a la consulta. Así sale la marcha. Si usted ve a los periódicos, la marcha es en defensa del derecho a la consulta de los pueblos indígenas. El presidente ha dicho que vamos a llevar adelante la consulta en el marco de la normativa nacional, en el marco de la nuestra Constitución Política del Estado y las normas internacionales, convenio 169 Declaración Universal de los Derechos de los Pueblos Indígenas. Y ha dicho, además, con el acompañamiento de organismos internacionales, de las Naciones Unidas, de la OIT. Y los indígenas dicen ‘no queremos consulta.’ No entendemos. Los indígenas –—pero no solamente ahora es el derecho a la consulta, no solamente es TIPNIS. TIPNIS es un punto ya, sino hay otras 15 puntos más que han agregado. Quince puntos. Ellos dicen que esta marcha es en defensa de la Madre Tierra. (…)
Por un lado dicen que están en defensa de la Madre Tierra, ¿no? Quieren defender sus bosques. Y por otro lado te dicen ‘queremos participar en RED.’ Yo pienso, así no piensan los indígenas. Ese pliego no ha sido hecho por los indígenas. Y hay varias contradicciones que ellos, esta elaboración de los TIPNIS. Nosotros hemos insistido varias veces para dialogar. No quieren.
LAND: Y ¿quién hizo el pliego entonces?
DC: Yo no sé. Hay que preguntar. Posiblemente son esas ONGs que no conocen nuestras necesidades. Nunca han vivido como nosotros. Siempre han tenido buenos sueldos. Y han trabajado años. La razón de ser de ellos es un movimiento campesino aislado, excluido. Mientras haya un movimiento campesino indígena aislado, excluido, ellos van a seguir con sus ONGs, ganando buenos sueldos. (…)
Ellos han dicho, cuando han salido —ya estaba el tramo uno, el tramo dos— cuando han salido, han dicho por el derecho a la consulta. El Presidente ha dicho ‘vamos a hacer la consulta.’
LAND: ¿Pero la consulta no se supone que tendría que ser antes de que comience el proyecto de construcción?
DC: El Presidente ha dicho ‘yo puedo cometer errores, pero jamás voy a traicionar.
LAND: ¿Fue un error entonces, no hacer la consulta?
DC: Puede ser. No sé.
LAND: ¿Cuáles son los beneficios que va a brindar esta carretera al país?
DC: Necesitamos integrarnos nosotros. Necesitamos integrarnos. Es una —es un pedido, es un pedido de muchos (…) llevamos en este momento un referéndum, seguramente nos van a pedir carreteras. Hemos tenido reuniones. Los ministros cuando han tenido reuniones con los de TIPNIS, ellos no solamente quieren que la carretera pase así, sino quieren que vaya a sus comunidades, algunos quieren que pase por su puerta de su casa. Por eso tienen miedo a la consulta ellos ahora. Nosotros, cuando el Presidente dice que vamos a llevar adelante la consulta con el acompañamiento de las Naciones Unidas, y hay una publicación de las Naciones Unidas, dice que ellos están dispuestos a acompañar. ¿Por qué no quieren los indígenas?
LAND: ¿Y qué entonces de la ley de la Madres Tierra? ¿Y de –
DC: No de la Madre —en defensa de la Pachamama.
LAND: Claro.
DC: ¿Cuántos kilómetros hoy día se han construido sobre nuestra Pachamama?
LAND: No, pero ¿por qué construir más?
DC: No, la Pachamama es total. No sólo es TIPNIS nuestra Pachamama. Cuando hablamos de la Pachamama, estamos hablando de Canadá, de Estados Unidos, todo. Estamos hablando del planeta. ¿Cuántos kilómetros hoy día se han construido sobre esta nuestra Pachamama? ¿Cuántos kilómetros?
LAND: No tengo idea.
DC: Y esos movimientos que dicen solidaridad con TIPNIS, por qué no dicen nada? Incluso hay movimientos de solidaridad en Estados Unidos. ¿Y qué están haciendo ellos? ¿Qué moral tienen? Hoy día cuanto —pregúntense ¿cuántos kilómetros —hoy día se han construido sobre nuestra Pachamama? Y ¿qué daños ocasionan ellos? Ellos dicen defender la Pachamama, pero yo les pregunto a ellos  —y hemos conversado, de hecho— ¿cuál le hace daño a la nuestra Madre Tierra? ¿Una carretera de 400 kilómetros? O sea, ¿cuál le hace daño, más daño a nuestra Madre Tierra, nuestra Pachamama —una herida de 400 kilómetros, o un herida de 60 kilómetros? ¿Cuál le hace más daño?
LAND: ¿Cuál es el aliado más importante que tiene Bolivia hoy en día en esa cruzada ambientalista?
DC: Los movimientos sociales. Sí.
LAND: ¿En términos de países miembros de la ONU, por ejemplo?
DC: Mira, los movimientos sociales. Fundamentalmente los movimientos sociales. Estos movimientos sociales se han reunido 140 países en Bolivia. Líderes, representantes de los movimientos sociales, donde han estado científicos, representantes de gobiernos y han creado un movimiento mundial en defensa de la Madre Tierra y de lucha contra el capitalismo, en Tiquipaya. Esa es nuestra fuerza. Ese es nuestro aliado. Por eso, cuando nos dicen (…) yo les digo, no estamos solos. Estamos con los pueblos. Y el tiempo va a darnos razón.

el TIPNIS
Pablo Solón le pide a Evo suspender definitivamente el camino que atraviese el TIPNIS*
Septiembre 28 del 2011
Presidente y Hermano Evo Morales
Desde el 2006 Bolivia ha mostrado liderazgo al mundo en entorno a los desafíos mas cruciales de nuestro tiempo. Hemos logrado la aprobación del Derecho Humano al Agua y el Saneamiento en las Naciones Unidas, e impulsado una visión de sociedad basada en el Vivir Bien en vez del consumismo.
No obstante, debe haber coherencia entre lo que decimos y lo que hacemos. No se puede hablar de defensa de la Madre Tierra y al mismo tiempo promover la construcción de una carretera que hiere a la Madre Tierra, no respeta los derechos indígenas y viola de manera “imperdonable” los derechos humanos.
Cómo país impulsor del Día Internacional de la Madre Tierra tenemos la gran responsabilidad de dar el ejemplo a nivel mundial. Nosotros no podemos repetir las recetas del “desarrollismo” fracasado que ha llevado a la relación de la humanidad con la Madre Tierra a un punto de quiebre.
Es incomprensible que promovamos la realización de una Conferencia Mundial de las Naciones Unidas sobre los Pueblos Indígenas para el 2014 si no somos vanguardia en la aplicación de la “consulta previa, libre e informada” a los pueblos indígenas dentro de nuestro propio país.
La Octava Marcha Indígena tiene planteamientos incoherentes e incorrectos en relación a temas como hidrocarburos y la venta de bonos de carbono de los bosques que mercantilizan la Madre Tierra (conocido como REDD). Pero su preocupación por la construcción de la carretera es justa.
Miles de delegados de los cinco continentes que participaron en la Primera Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático y los derechos de la Madre Tierra están profundamente contrariados por la posición del gobierno de Bolivia.
El conflicto del TIPNIS nunca debió haber existido. La integración caminera es necesaria pero no a través del “Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Secure” (TIPNIS). Es cierto que será mas caro construir una carretera que no va a través del TIPNIS. Pero tratar de ahorrar 200 o 300 millones de dólares sin tomar cuenta los costos socio ambientales es ir en contra de los principios del Vivir Bien.
Para cerrarle el paso a la derecha que quiere instrumentalizar la protesta para retornar al pasado debemos ser más consecuentes que nunca en la defensa de los derechos humanos, los derechos de los pueblos indígenas y los derechos de la Madre Tierra.
Aun es posible resolver esta crisis si se suspende definitivamente la construcción de la carretera a través del TIPNIS, llevamos a la justicia a los responsables de la represión a la marcha indígena, e iniciamos un amplio proceso participativo de debate nacional para definir una nueva agenda de acciones en el marco del Vivir Bien.
Pablo Solón
*Este título es de Aquí.

Bolivia: carreteras y política
Jorge Gómez Barata
Publicación original en MONCADA
Trato de imaginarme a los campesinos de la comarca donde nací y crecí un tramo: analfabetos, humillados por la pobreza, encorvados, sin una pieza sana en la boca y ancianos a los cuarenta años, protestando porque el gobierno proyecta: ¡Construirles una carretera!
Es francamente difícil asimilar que haya en Bolivia indígenas que comportándose como si fueran activistas Green Peace, en nombre de la ecología, se opongan a la construcción de una vía que es símbolo de progreso. Es obvio que el debate que ha puesto a Evo Morales contra las cuerdas ha sido manipulado. En conjunto el ejercicio es surrealista.
Sobre todo cuando se vinculan a propósitos políticos, las actitudes de pretendida defensa del medio natural no son siempre ni necesariamente expresión de ideas y posiciones de vanguardia. En ocasiones se trata de maniobras para frenar el desarrollo de los países del sur y para desacreditar las políticas de gobiernos avanzados, algunos de los cuales paradójicamente se caracterizan por una predica ecológica que trasciende responsabilidades y capacidades.
No existe ningún elemento de la cultura material que influya más en el progreso que las vías de comunicación, razón por la cual su expansión forma parte esencial de todos los programas de desarrollo. La Carrera de las Indias abierta por Cristóbal Colón, el Estrecho de Magallanes, la Ruta de la Seda, la Vía Apia, el Ferrocarril Transiberiano y el Expreso de Oriente, son algunos ejemplos.
Basta con consultar los mapas de cualquiera de los países desarrollados para percibir el tejido que forman las vías de comunicación. Europa, Estados Unidos, Japón y ahora China, pueden ser recorridos de un extremo a otro por magnificas autopistas y líneas de ferrocarril que atraviesan prados, bosques, praderas y desiertos, cumbres nevadas, valiéndose de pasos, puertos de montaña, túneles, puentes fijos o colgantes, maravillas de la ingeniería que evidencia la capacidad del ingenio y el trabajo humano para vencer obstáculos y promover el progreso.  
Además de ser polos decisivos para el desarrollo, la construcción de las vías de comunicación son las obras de infraestructura que más empleos generan. En los años cincuenta, ante la necesidad de  proporcionar trabajo a millones de hombres desmovilizados e impulsar el desarrollo, el presidente norteamericano Dwight Eisenhower concibió el proyecto de unir a todo el país mediante una red de autopistas interestatales que en total suman 75 376 kilómetros. El costo fue de más de 1 billón de dólares y la construcción demoró 35 años.
De haber prevalecido mentalidades como las de los presuntos campesinos bolivianos, jamás se hubieran construido los canales de Suez y Panamá, no hubiera existido el Euro túnel, que por el fondo del Canal de la Mancha une a Francia con Inglaterra y obviamente, no hubiera sido aprobado el proyecto para la construcción de un paso bajo el estrecho de Bering que conectará a Rusia con Estados Unidos y a Asia con América  vinculando a las mayores economías del mundo, incluyendo a China.
 El túnel por una de las zonas más remotas, aisladas y vírgenes del planeta  a un costo de 65 000 millones de dólares además de para el transporte de carga y pasajeros, servirá para exportar petróleo, gas y electricidad de Rusia a Estados Unidos. Cuando la obra esté terminada: Londres, Moscú, Siberia, Alaska, Beijing y Nueva York formaran parte de una misma ruta. La magnitud de las vías accesorias dejaría sin aliento a los ecologistas bolivianos: 3 500 kilómetros de carreteras y vías férreas del lado ruso y 2 000 en territorio norteamericano.
El conato que ha movilizado a una fracción mínima aunque ruidosa de la nación boliviana, entre otras cosas evidencia el atraso que impide comprender que ninguna estrategia de desarrollo puede avanzar sin incidir sobre el medio natural; demuestra la capacidad de las fuerzas reaccionarias para manipular a una parte de la población, llevándola incluso a actuar contra sus intereses y la debilidad de las instituciones que muchas veces son rehenes de caprichos y actitudes retrogradas.
Ante un lamentable incidente generado por la represión a los opositores a la obra vial, el presidente Evo Morales, uno de los gobernantes que en todo el mundo defiende con más fervor posiciones ecologistas y expresa con mejores argumentos su preocupación por el planeta, ha ordenado la suspensión del proyecto. Por ahora el único mandatario salido de los pueblos originarios del Nuevo Mundo, ponente de una filosofía de gobernar obedeciendo al pueblo, perdió.
La pregunta es: ¿Quién ganó? No creo que haya sido el campesinado, tampoco fue Bolivia ni la Pacha Mama. No hay manera de evadir el hecho de que el progreso implica interactuar con la naturaleza, incidir sobre ella y modificarla. Allá nos vemos.
La Habana, 27 de septiembre de 2011

lucha de nuestros pueblos
Reflexiones del compañero Fidel:
Chávez, Evo y Obama
Primera parte
(Tomado de CubaDebate)
Hago un alto en las tareas que ocupan la totalidad de mi tiempo en estos días, para dedicar unas palabras a la singular oportunidad que ofrece para la ciencia política el sexagésimo sexto período de la Asamblea General de Naciones Unidas.
El acontecimiento anual demanda un singular esfuerzo de los que asumen las más altas responsabilidades políticas en muchos países. Para estos, constituye una dura prueba; para los aficionados a ese arte, que no son pocos ya que a todos afecta vitalmente, resulta difícil sustraerse a la tentación de observar el interminable pero instructivo espectáculo.
Existen, en primer lugar, infinidad de temas peliagudos y conflictos de intereses. Para gran número de los participantes es necesario tomar posición sobre hechos que constituyen flagrantes violaciones de principios. Por ejemplo: ¿qué posición adoptar sobre el genocidio de la OTAN en Libia? ¿Desea alguien dejar constancia de que bajo su dirección el gobierno de su país apoyó el monstruoso crimen realizado por Estados Unidos y sus aliados de la OTAN, cuyos sofisticados aviones de combate, con o sin piloto, llevaron a cabo más de veinte mil misiones de ataque contra un pequeño Estado del Tercer Mundo que cuenta apenas con seis millones de habitantes, alegando las mismas razones que ayer se utilizaron para atacar e invadir Serbia, Irak, Afganistán y hoy amenazan con hacerlo en Siria o cualquier otro país del mundo?
¿No fue precisamente el Gobierno del Estado anfitrión de la ONU quien ordenó la carnicería de Vietnam, Laos y Cambodia, el ataque mercenario de Bahía de Cochinos en Cuba, la invasión de Santo Domingo, la "Guerra Sucia" en Nicaragua, la ocupación de Granada y Panamá por las fuerzas militares de Estados Unidos y la masacre de panameños en El Chorrillo? ¿Quién promovió los golpes militares y los genocidios en Chile, Argentina y Uruguay, que costaron decenas de miles de muertos y desaparecidos? No hablo de cosas ocurridas hace 500 años, cuando los españoles iniciaron el genocidio en América, o hace 200 cuando los yanquis exterminaban indios en Estados Unidos o esclavizaban africanos, a pesar de que "todos los hombres nacen libres e iguales" como decía la Declaración de Philadelphia. Hablo de hechos ocurridos en las últimas décadas y que están ocurriendo hoy.
Estos hechos no pueden dejar de recordarse y repetirse cuando tiene lugar un acontecimiento de la importancia y el relieve de la reunión que se realiza en la Organización de Naciones Unidas, donde se pone a prueba la entereza política y la ética de los gobiernos.
Muchos de ellos representan a países pequeños y pobres necesitados de apoyo y cooperación internacional, tecnología, mercados y créditos, que las potencias capitalistas desarrolladas han manejado a su antojo.
A pesar del monopolio desvergonzado de los medios masivos de información y los métodos fascistas de Estados Unidos y sus aliados para confundir y engañar a la opinión mundial, la resistencia de los pueblos crece, y eso puede apreciarse en los debates que se están produciendo en Naciones Unidas.
No pocos líderes del Tercer Mundo, pese a los obstáculos y las contradicciones indicadas, han expuesto con valentía sus ideas. Las propias voces que emanan de los gobiernos de América Latina y el Caribe no contienen ya el acento lacayuno y bochornoso de la OEA, que caracterizó a los pronunciamientos de los Jefes de Estados en décadas pasadas. Dos de ellos se han dirigido a ese foro; ambos, el presidente bolivariano Hugo Chávez, mezcla de las razas que integran al pueblo de Venezuela y Evo Morales, de pura estirpe indígena milenaria, vertieron sus conceptos en esa reunión, uno a través de un mensaje y el otro a viva voz, respondiendo al discurso del Presidente yanki.
Telesur transmitió los tres pronunciamientos. Gracias a eso pudimos conocer desde la noche del martes 20 el mensaje del Presidente Chávez, leído detenidamente por Walter Martínez en su programa Dossier. Obama pronunció su discurso la mañana del miércoles como Jefe de Estado del país anfitrión de la ONU, y Evo pronunció el suyo en las primeras horas de la tarde de ese propio día. En aras de la brevedad tomaré párrafos esenciales de cada texto.
Chávez no pudo asistir personalmente a la cumbre de Naciones Unidas, tras 12 años de lucha sin descanso un solo día que puso en riesgo su vida y afectó su salud y hoy lucha abnegadamente por su plena recuperación. Era difícil sin embargo que su mensaje valiente no abordara el tema más álgido de la histórica reunión. Lo transcribo casi íntegramente:
"Dirijo estas palabras a la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, [] para ratificar, en este día y en este escenario, el total apoyo de Venezuela al reconocimiento del Estado palestino: al derecho de Palestina a convertirse en un país libre, soberano e independiente. Se trata de un acto de justicia histórico con un pueblo que lleva en sí, desde siempre, todo el dolor y el sufrimiento del mundo.
"El gran filósofo francés Gilles Deleuze, […] dice con el acento de la verdad: "La causa palestina es ante todo el conjunto de injusticias que este pueblo ha padecido y sigue padeciendo." Y también es, me atrevo agregar, una permanente e indoblegable voluntad de resistencia que ya está inscrita en la memoria heroica de la condición humana. […] Mahmud Darwish, voz infinita de la Palestina posible, nos habla desde el sentimiento y la conciencia de este amor: ‘No necesitamos el recuerdo/ porque en nosotros está el Monte Carmelo/ y en nuestros párpados está la hierba de Galilea./ No digas: ¡si corriésemos hacia mi país como el río!/ ¡No lo digas!/ Porque estamos en la carne de nuestro país/ y él está en nosotros.’
"Contra quienes sostienen, falazmente que lo ocurrido al pueblo palestino no es un genocidio, el mismo Deleuze sostiene con implacable lucidez: ‘En todos los casos se trata de hacer como si el pueblo palestino no solamente no debiera existir, sino que no hubiera existido nunca. Es, cómo decirlo, el grado cero del genocidio: decretar que un pueblo no existe; negarle el derecho a la existencia’."
"…la resolución del conflicto del Medio Oriente pasa, necesariamente, por hacerle justicia al pueblo palestino; este es el único camino para conquistar la paz.
"Duele e indigna que quienes padecieron uno de los peores genocidios de la historia, se hayan convertido en verdugos del pueblo palestino; duele e indigna que la herencia del Holocausto sea la Nakba. E indigna, a secas, que el sionismo siga haciendo uso del chantaje del antisemitismo contra quienes se oponen a sus atropellos y a sus crímenes. Israel ha instrumentalizado e instrumentaliza, con descaro y vileza, la memoria de las víctimas. Y lo hace para actuar, con total impunidad, contra Palestina. De paso, no es ocioso precisar que el antisemitismo es una miseria occidental, europea, de la que no participan los árabes. No olvidemos, además, que es el pueblo semita palestino el que padece la limpieza étnica practicada por el Estado colonialista israelí."
"…una cosa es rechazar al antisemitismo, y otra muy diferente aceptar pasivamente que la barbarie sionista le imponga un régimen de apartheid al pueblo palestino. Desde un punto de vista ético, quien rechaza lo primero, tiene que condenar lo segundo."
"… el sionismo, como visión del mundo, es absolutamente racista. Las palabras de Golda Meir, en su aterrador cinismo, son prueba fehaciente de ello: ‘¿Cómo vamos a devolver los territorios ocupados? No hay nadie a quien devolverlos. No hay tal cosa llamada palestinos. No era como se piensa que existía un pueblo llamado palestino, que se considera él mismo como palestino y que nosotros llegamos, los echamos y les quitamos su país. Ellos no existían.’"
"Léase y reléase ese documento que se conoce históricamente como Declaración de Balfour del año 1917: el Gobierno británico se arrogaba la potestad de prometer a los judíos un hogar nacional en Palestina, desconociendo deliberadamente la presencia y la voluntad de sus habitantes. Hay que acotar que en Tierra Santa convivieron en paz, durante siglos, cristianos y musulmanes, hasta que el sionismo comenzó a reivindicarla como de su entera y exclusiva propiedad."
"Al concluir la Segunda Guerra Mundial, se exacerbaría la tragedia del pueblo palestino, consumándose la expulsión de su territorio y, al mismo tiempo, de la historia. En 1947 la ominosa e ilegal resolución 181 de las Naciones Unidas recomienda la partición de Palestina en un Estado judío, un Estado árabe y una zona bajo control internacional (Jerusalén y Belén). Se concedió, […] el 56 % del territorio al sionismo para la constitución de su Estado. De hecho, esta resolución violaba el derecho internacional y desconocía flagrantemente la voluntad de las grandes mayorías árabes: el derecho de autodeterminación de los pueblos se convertía en letra muerta."
"… contra lo que Israel y Estados Unidos pretenden hacerle creer al mundo, a través de las transnacionales de la comunicación, lo que aconteció y sigue aconteciendo en Palestina, digámoslo con Said, no es un conflicto religioso: es un conflicto político, de cuño colonial e imperialista; no es un conflicto milenario sino contemporáneo; no es un conflicto que nació en el Medio Oriente sino en Europa.
"¿Cuál era y cuál sigue siendo el meollo del conflicto?: Se privilegia la discusión y consideración de la seguridad de Israel, y para nada la de Palestina. Así puede corroborarse en la historia reciente: basta con recordar el nuevo episodio genocida desencadenado por Israel a través de la operación ‘Plomo Fundido’ en Gaza.
"La seguridad de Palestina no puede reducirse al simple reconocimiento de un limitado autogobierno y autocontrol policíaco en sus ‘enclaves’ de la ribera occidental del Jordán y en la Franja de Gaza, dejando por fuera no solo la creación del Estado palestino, sobre las fronteras anteriores a 1967 y con Jerusalén oriental como su capital, los derechos de sus nacionales y su autodeterminación como pueblo, sino, también, la compensación y consiguiente vuelta a la Patria del 50% de la población palestina que se encuentra dispersa por el mundo entero, tal y como lo establece la resolución 194.
"Es increíble que un país (Israel) que debe su existencia a una resolución de la Asamblea General, pueda ser tan desdeñoso de las resoluciones que emanan de las Naciones Unidas, denunciaba el padre Miguel D’Escoto cuando pedía el cese de la masacre contra el pueblo de Gaza, a finales de 2008 y principios de 2009."
"Es imposible ignorar la crisis de Naciones Unidas. Ante esta misma Asamblea General sostuvimos, en el año 2005, que el modelo de Naciones Unidas se había agotado. El hecho de que se haya postergado el debate sobre la cuestión palestina, y que se le esté saboteando abiertamente, es una nueva confirmación de ello.
"Desde hace ya varios días Washington viene manifestando que vetará en el Consejo de Seguridad lo que será resolución mayoritaria de la Asamblea General: el reconocimiento de Palestina como miembro pleno de la ONU. Junto a las Naciones hermanas que conforman la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), en la Declaración de reconocimiento del Estado palestino, hemos deplorado, desde ya, que tan justa aspiración pueda ser bloqueada por esta vía. Como sabemos, el imperio, en éste y en otros casos, pretende imponer un doble estándar en el escenario mundial: es la doble moral yanqui que viola el derecho internacional en Libia, pero permite que Israel haga lo que le dé la gana, convirtiéndose así en el principal cómplice del genocidio palestino a manos de la barbarie sionista. Recordemos unas palabras de Said que meten el dedo en la llaga: ‘Debido a los intereses de Israel en Estados Unidos, la política de este país en torno a Medio Oriente es, por tanto, israelocéntrica.’"
"Quiero finalizar con la voz de Mahmud Darwish en su memorable poema: ‘Sobre esta tierra hay algo que merece vivir: sobre esta tierra está la señora de la tierra, la madre de los comienzos,/ la madre de los finales. Se llamaba Palestina. Se sigue llamando Palestina./ Señora: yo merezco, porque tú eres mi dama, yo merezco vivir.’"
"Se seguirá llamando Palestina: ¡Palestina vivirá y vencerá! ¡Larga vida a Palestina libre, soberana e independiente!
"Hugo Chávez Frías.
"Presidente de la República Bolivariana de Venezuela".
Cuando la reunión se inició en la mañana siguiente sus palabras estaban ya en el corazón y la mente de las personas allí reunidas.
El líder bolivariano nunca fue enemigo del pueblo judío. Hombre de particular sensibilidad, detestaba profundamente el brutal crimen cometido por los nazis contra niños, mujeres y hombres, jóvenes y ancianos en los campos de concentración donde también fueron víctimas de atroces crímenes e intento de exterminio los gitanos, que nadie sin embargo recuerda y nunca se mencionan. Igualmente cientos de miles de rusos perecieron en esos campos de exterminio como raza inferior en el concepto racial nazi.
Cuando Chávez regresó a su país, procedente de Cuba, la noche del jueves 22 de septiembre, se refirió con indignación al discurso pronunciado por Barack Obama en las Naciones Unidas. Pocas veces lo escuché hablar con tanto desencanto sobre un líder al que trataba con determinado respeto, como una víctima de la propia historia de la discriminación racial en Estados Unidos. Nunca lo consideró capaz de actuar como lo habría hecho George Bush y conservaba un recuerdo respetuoso de las palabras intercambiadas con él en la reunión de Trinidad y Tobago.
"Ayer estuvimos oyendo un conjunto de discursos, anteayer también, allá en Naciones Unidas, discursos precisos como el de la presidenta Dilma Rousseff; discurso de alto valor ético como el del presidente Evo Morales; un discurso que pudiéramos catalogar como un monumento al cinismo, el discurso del presidente Obama, es un monumento al cinismo que su propia cara delataba, su propia cara era un poema; un hombre llamando a la paz, imagínate tú, Obama llamando a la paz, ¿con qué moral? Un monumento histórico al cinismo el discurso del presidente Obama.
"Discursos precisos, orientadores, estuvimos oyendo: el del presidente Lugo, el de la presidenta argentina, fijando posiciones valientes ante el mundo."
Cuando se inició la reunión de Nueva York la mañana del miércoles 21 de septiembre, el Presidente de Estados Unidos, —tras las palabras de la Presidenta de Brasil que inició los debates, y después de la presentación de rigor— ocupó el podio e inició su discurso.
"En siete décadas —comenzó diciendo—, cuando la ONU impidió que hubiese una Tercera Guerra Mundial, seguimos en un mundo marcado por el conflicto y plagado de pobreza; cuando proclamamos nuestro amor por la paz y odio por la guerra, sigue habiendo convulsiones en el mundo que nos ponen a todos en peligro."
No se sabe cuál sería el momento en que según Obama, la ONU impidió una Tercera Guerra Mundial.
"Asumí el cargo en un momento de dos guerras para Estados Unidos, una guerra contra el extremismo, que nos llevó a la guerra; en primer lugar, Osama Bin Laden y su organización Al-Qaeda seguían libres. Hoy establecimos una nueva dirección, al final de este año las operaciones militares en Iraq van a terminar, vamos a tener relaciones normales con un país soberano, miembro de la comunidad de naciones. Esa alianza se fortalecerá con el fortalecimiento de Iraq, de su fuerza de seguridad, de su gobierno, de su pueblo y también de sus aspiraciones."
¿De qué país está realmente hablando Obama?
"Al poner fin a la guerra en Iraq, Estados Unidos y sus aliados comenzarán la transición en Afganistán; tenemos un país en Afganistán que puede asumir la responsabilidad del futuro de su país, a medida que lo hacen vamos sacando nuestras propias fuerzas y vamos construyendo una alianza solidaria con el pueblo afgano. No debe haber duda, entonces, de que la ola de la guerra está revirtiéndose.
"Asumí el poder cuando miles de estadounidenses servían en Afganistán y en Iraq, al final de este año ese número va a reducirse a la mitad y seguirá disminuyendo. Esto es fundamental para la soberanía, tanto de Iraq como de Afganistán y también esencial para el fortalecimiento de la ONU y de Estados Unidos, cuando construimos nuestra propia nación; además, estamos saliendo de allí con una posición fuerte. Hace 10 años había una herida abierta y hierros retorcidos, un corazón roto en el centro de esta ciudad; hoy cuando se levanta una nueva torre simboliza la renovación de Nueva York; hoy Al-Qaeda tiene más presiones que nunca, su liderazgo ha sido degradado, Osama Bin Laden, un hombre que mató miles de personas de docenas de países, ya no pondrá en peligro la paz del mundo."
¿De quién fue aliado Bin Laden, quién realmente lo entrenó y armó para combatir a los soviéticos en Afganistán? No fueron los socialistas, ni los revolucionarios en ninguna parte del mundo.
"Esta década ha sido muy difícil, […] pero hoy estamos en la encrucijada de la historia, con la oportunidad de movernos de manera decisiva hacia la paz, para hacerlo debemos volver a la sabiduría de los que crearon esta institución. Las Naciones Unidas y su Carta, insta a que nos unamos para mantener la paz y la seguridad internacionales."
¿Quién tiene bases militares en todas partes del mundo, quién es el mayor exportador de armas, quién posee cientos de satélites espías, quién invierte más de un millón de millones de dólares anuales en gastos militares?
"Este año ha sido un momento de grandes transformaciones, más naciones han avanzado para mantener la paz y la seguridad y más individuos están reclamando su derecho a vivir en paz y en libertad."
Cita luego los casos de Sudán del Sur y Costa de Marfil. No dice que en el primero, las trasnacionales yanquis se lanzaron sobre las reservas petroleras de ese nuevo país, cuyo presidente en esa propia Asamblea de la ONU, dijo que era un recurso valioso, pero agotable y proponía el uso racional y óptimo del mismo.
Tampoco expresó Obama que la paz, en Costa de Marfil, fue alcanzada con el apoyo de los soldados colonialistas de un eminente miembro de la belicosa OTAN que acaba de lanzar miles de bombas sobre Libia.
Menciona poco después a Túnez, y atribuye a Estados Unidos el mérito del movimiento popular que derrocó al gobierno de ese país, un aliado del imperialismo.
Más asombroso todavía, Obama pretende ignorar que Estados Unidos fue el responsable de que en Egipto se instalara el gobierno tiránico y corrupto de Hosni Mubarak, que ultrajando los principios de Nasser, se alió al imperialismo, arrebató a su país decenas de miles de millones y tiranizó a ese valeroso pueblo.
"Hace un año, —afirma Obama— Egipto había tenido un presidente durante casi 30 años. Durante 18 días los ojos del mundo estaban centrados en la plaza Taghir, donde los egipcios de todas las partes de la sociedad, jóvenes, niños, mujeres, hombres, musulmanes y cristianos, demandaban sus derechos universales. Vimos en esos manifestantes la fuerza de no violencia que nos ha llevado de Nueva Delhi a Selma y vimos que el cambio llegó a Egipto y al mundo árabe por medios pacíficos."
"Día a día frente a las balas y a las armas el pueblo libio no renunció a su libertad, y cuando fueron amenazados por esa atrocidad que hemos visto mucho en los últimos siglos, la ONU respetó su Carta, el Consejo de Seguridad autorizó las medidas necesarias para evitar una masacre en Libia. La Liga Árabe exigió esta intervención, hubo una alianza y una coalición para evitar el avance de las fuerzas de Gaddafi."
"Ayer los líderes de una nueva Libia tomaron su lugar aquí, con nosotros, y esta semana las Naciones Unidas y Estados Unidos están abriendo su nueva embajada en Trípoli.
"He aquí cómo la comunidad internacional debe funcionar, y debería funcionar: las naciones que se unan para buscar la paz y la seguridad y los individuos que exigen sus derechos.
"Todos nosotros tenemos la responsabilidad de apoyar a la nueva Libia, el nuevo gobierno libio que enfrenta transformar esta promesa en una bendición para todos los libios."
"El régimen de Gaddafi acabó, Gbagbo, Ben Ali, Mubarak, ya no están en el poder. Osama Bin Laden se ha ido, y la idea de que el cambio solamente puede llegar por la violencia ha sido enterrado junto con él."
Observen la forma poética con que Obama despacha el asunto de Bin Laden, cualquiera que haya sido la responsabilidad de este antiguo aliado, ejecutado con un disparo en el rostro delante de su esposa y sus hijos, y lanzado al mar desde un portaaviones, ignorando costumbres y tradiciones religiosas de más de mil millones de creyentes y principios jurídicos elementales establecidos por todos los sistemas penales. Tales métodos no conducen ni conducirán jamás a la paz.
"Algo está pasando en nuestro mundo —prosigue respecto a Libia—, la manera como las cosas han sido es como será en el futuro. La mano de la tiranía ha terminado, los tiranos han sido ignorados y el poder lo tiene ahora el pueblo. Los jóvenes rechazan la dictadura, rechazan la mentira de que algunas razas, algunos pueblos, algunas etnias no merecen la democracia.
"La promesa en papel de que todos nacemos libres y con el mismo derecho cada vez está más cerca de ser realidad […] La medida del éxito es si las personas pueden vivir en una libertad, dignidad y seguridad sustentable, y la ONU y sus miembros deben hacer lo necesario para apoyar estas aspiraciones básicas, y tenemos más trabajo que hacer en este sentido."
De inmediato la emprende contra otro país musulmán donde como es conocido, sus servicios de inteligencia junto a los de Israel, asesinan sistemáticamente a los científicos más destacados de la tecnología militar.
Acto seguido amenaza a Siria, donde la agresividad yanqui puede conducir a una masacre mucho más espantosa que la de Libia: "Hoy, hombres, mujeres y niños han sido asesinados y torturados por el régimen de Siria; miles han sido asesinados, muchos durante el período sagrado del Ramadán; miles han atravesado la frontera de Siria.
"El pueblo sirio ha mostrado dignidad y valentía en su búsqueda de justicia, protestando pacíficamente y muriendo por los mismos valores que esta institución defiende. Ahora bien, la cuestión es sencilla: ¿Vamos a apoyar al pueblo sirio o vamos a apoyar a sus opresores? La ONU ya ha aplicado sanciones a los líderes sirios. Apoyamos la transferencia de poder que responda al deseo del pueblo sirio, y muchos se nos han unido en este esfuerzo; pero por el bien de Siria y la paz y seguridad del mundo debemos hablar con una sola voz: no hay excusa para la acción. Ha llegado el momento para que el Consejo de Seguridad sancione al régimen de Siria y apoye al pueblo sirio".
¿Ha quedado acaso algún país excluido de las amenazas sangrientas de este ilustre defensor de la seguridad y la paz internacional? ¿Quién concedió a Estados Unidos tales prerrogativas?
"En la región, debemos responder a los llamados por el cambio. En Yemen, mujeres, niñas, hombres se han reunido en las plazas, todos los días, con la esperanza de que su determinación y el derrame de su sangre lleve a un cambio. El pueblo estadounidense apoya esas aspiraciones. Debemos trabajar con los vecinos y los socios en el mundo para buscar un camino que lleve a una transición pacífica del gobierno de Saleh, y que haya elecciones libres y justas lo más pronto posible.
"En Bahrein se han tomado medidas para la reforma en la rendición de cuentas. Estamos contentos con ello, pero se requiere mucho más. Somos amigos de Bahrein, y seguiremos exigiéndoles al gobierno y a los opositores que busquen un diálogo significativo que llegue a cambios pacíficos y cumpla los deseos del pueblo. Creemos que el patriotismo de Bahrein puede ser mayor que el sectarismo que le separa; es difícil, pero se puede lograr."
No menciona en absoluto que allí se encuentra una de las mayores bases militares de la región y que las transnacionales yanquis controlan y disponen a su antojo de las mayores reservas de petróleo y gas de Arabia Saudita y los Emiratos Árabes.
"Creemos que cada nación debe tener su propio camino para lograr satisfacer las aspiraciones de los pueblos. No podemos estar de acuerdo con todos aquellos que se expresan políticamente, pero siempre vamos a estar defendiendo los derechos universales que fueron apoyados por esta Asamblea, derechos que dependen de elecciones libres y justas, gobiernos transparentes y que rindan cuentas, respeto por los derechos de las mujeres y las minorías, justicia igual y justa. Eso merece nuestro pueblo. Estos son los elementos de la paz que pueden durar."
"… Estados Unidos va a seguir apoyando a las naciones que van hacia la democracia con mayor comercio e inversión, para que la libertad sea seguida por la oportunidad. Continuaremos nuestro compromiso con los gobiernos, pero también con la sociedad civil, estudiantes, empresarios, partidos políticos, la prensa, los medios.
"Hemos condenado a los que violan los derechos humanos e impiden que lleguen a esos países. Castigamos a los que violan esos derechos, y siempre vamos a servir como una voz de aquellos que han sido silenciados."
Después de esta larga perorata, el insigne Premio Nobel entra en el espinoso tema de su alianza con Israel que por cierto, no figura entre los privilegiados poseedores de uno de los más modernos sistemas de armas nucleares y medios capaces de alcanzar objetivos distantes. Conoce perfectamente bien cuán arbitraria e impopular es esa política.
"Sé que esta semana hay un tema que es fundamental en este sentido, para estos derechos. Es una prueba para la política exterior de Estados Unidos cuando el conflicto entre Israel y palestinos continúa. Hace un año estuve en este podio e insté para que hubiese una Palestina libre. Creí entonces, y lo creo hoy, que el pueblo palestino merece su Estado, pero también dije que una paz genuina solo puede lograrse entre israelíes y palestinos mismos. Un año después, a pesar de muchos esfuerzos de Estados Unidos y otros, las partes no han podido salvar sus diferencias. Ante este estancamiento he planteado una nueva base de negociaciones, lo hice en mayo último. Esa base es clara, es conocida para todos: los israelíes deben saber que cualquier acuerdo debe tener garantías para su seguridad; los palestinos deben conocer las bases territoriales de su Estado. Yo sé que muchos han estado frustrados por la falta de avances, y yo también lo he estado y lo estoy. La cuestión no es la meta que buscamos, sino cómo logramos esa meta."
"La paz exige mucho trabajo, la paz no va a llegar por resoluciones ni declaraciones ante la ONU, si fuese tan fácil ya se hubiera logrado. Los israelíes y los palestinos deben sentarse, y van a vivir juntos, son ellos los que deben buscar una solución viable en sus fronteras, deben buscar una solución sobre Jerusalén, sobre los refugiados. La paz depende del acuerdo entre aquellos que deben vivir juntos después que culminen nuestros discursos, mucho después de que nosotros hayamos votado."
Se extiende a continuación en una larga perorata para explicar y justificar lo inexplicable y lo injustificable.
"… No hay duda al respecto de que los palestinos han visto esto retrasado por demasiado tiempo, y es justamente porque creemos tanto en las aspiraciones del pueblo palestino que Estados Unidos ha invertido tanto tiempo y tanto esfuerzo en construir un Estado palestino y negociaciones que puedan cumplir esta meta del Estado palestino; pero hay que entender esto también, Estados Unidos hizo un compromiso con la seguridad de Israel, es esencial; nuestra amistad es profunda y duradera con este Estado israelí."
"El pueblo judío ha formado un Estado exitoso y merece reconocimiento y relaciones normales con sus vecinos, y los amigos de los palestinos no le hacen ningún favor al ignorar esta verdad.
"… cada lado tiene aspiraciones legítimas, y eso es parte de lo que hace la paz, algo tan difícil, y el plazo final solamente podrá romperse cuando cada parte aprenda a estar en los zapatos del otro, cada parte pueda ver el mundo a través de los ojos del otro. Eso debemos alentarlo, debemos promover esto."
Mientras tanto, los palestinos permanecen desterrados de su propia patria, sus casas son destruidas por monstruosos equipos mecánicos y un muro odioso, mucho más alto que el de Berlín, separa a unos palestinos de otros. Lo mejor que podía haber reconocido Obama es que los propios ciudadanos israelíes están ya cansados del derroche de recursos invertidos en la esfera militar, que los priva de paz y de acceso a los medios elementales de vida. Igual que los palestinos, ellos están sufriendo las consecuencias de esas políticas impuestas por Estados Unidos y los elementos más belicosos y reaccionarios del Estado sionista.
"A medida que hacemos frente a estos conflictos y a estas revoluciones debemos reconocer y recordar que […] la paz verdadera depende de crear la oportunidad que hace que la vida valga la pena ser vivida, y para ello debemos confrontar enemigos comunes de la humanidad: las armas nucleares, la pobreza, la ignorancia y la enfermedad."
¿Quién entiende este galimatías del Presidente de Estados Unidos ante la Asamblea General?
Acto seguido postula su ininteligible filosofía:
"Para hacer frente a la destrucción mundial debemos luchar por un mundo sin armas nucleares; en los últimos dos años comenzamos a andar ese sendero. Desde la Cumbre en Washington muchas naciones han comenzado a garantizar asegurar su material nuclear contra los posibles terroristas."
¿Puede haber terrorismo mayor que la política agresiva y belicosa de un país cuyo arsenal de armas nucleares podría destruir varias veces la vida humana en este planeta?
"Estados Unidos va a continuar trabajando para prohibir la prueba de materiales nucleares y de los materiales para estas armas nucleares", nos sigue prometiendo Obama. "Hemos comenzado, entonces, a avanzar en el sentido correcto. Estados Unidos está comprometido a cumplir con sus obligaciones; pero cuando cumplimos con nuestras obligaciones esperamos que las instituciones también ayuden a limitar la expansión de estas armas […] Irán no ha podido demostrar que su programa de armas nucleares es pacífico."
¡Vuelve con la matraquilla! Pero esta vez Irán no está sola; la acompaña la República Democrática de Corea.
"Corea del Norte todavía tiene que tomar medidas para reducir sus armas y reducir su beligerancia contra el Sur. Hay un futuro de muchas oportunidades para los pueblos de esas naciones si sus gobiernos cumplen con sus obligaciones internacionales; pero si continúan en el sendero fuera del derecho internacional, deben sentir mayores presiones de aislamiento, por eso es que nuestro compromiso hacia la paz y la seguridad exigen que esto se haga de esta manera."
Continuará mañana.
Fidel Castro Ruz
Septiembre 25 de 2011
7 y 36 p.m.

Chávez, Evo y Obama
Segunda parte y final
(Tomado de CubaDebate)
http://www.granma.co.cu/secciones/ref-fidel/fidel.jpgSi nuestro Premio Nobel se autoengaña, algo que está por probar, ello tal vez explique las increíbles contradicciones de sus razonamientos y la confusión sembrada entre sus oyentes.
No hay un ápice de ética, y ni siquiera de política, en su intento de justificar su anunciada decisión de vetar cualquier resolución a favor del reconocimiento de Palestina como Estado independiente y miembro de Naciones Unidas. Hasta políticos, que en nada comparten un pensamiento socialista y encabezan partidos que fueron estrechos aliados de Augusto Pinochet, proclaman el derecho de Palestina a ser miembro de la ONU.
Las palabras de Barack Obama, sobre el asunto principal que hoy se discute en la Asamblea General de esa organización, sólo pueden ser aplaudidas por los cañones, los cohetes y los bombarderos de la OTAN.
El resto de su discurso son palabras vacías, carentes de autoridad moral y de sentido. Observemos por ejemplo cuán huérfanas de ideas fueron, cuando en el mundo hambriento y saqueado por las transnacionales y el consumismo de los países capitalistas desarrollados Obama proclama:
"Para superar las enfermedades hay que mejorar los sistemas de salud. Continuaremos luchando contra el SIDA, la tuberculosis y el paludismo; nos centraremos en la salud de los adultos y niños, y hay que detectar y luchar contra cualquier peligro biológico como el H1N1, o una amenaza terrorista o una enfermedad."
"Las acciones en materia de cambio climático: Debemos utilizar los recursos escasos, y continuar el trabajo para construir, en base a lo que se hizo en Copenhague y Cancún, para que las grandes economías continúen con su compromiso. Juntos debemos trabajar para transformar la energía que es el motor de las economías y apoyar a otros que avanzan en sus economías. Ese es el compromiso para las próximas generaciones, y para garantizar que las sociedades logren sus potencialidades debemos permitir que los ciudadanos también logren sus potencialidades."
Todo el mundo sabe que Estados Unidos no firmó el Protocolo de Kyoto y ha saboteado todos los esfuerzos por preservar la humanidad de las terribles consecuencias del cambio climático, a pesar de ser el país que consume una parte considerable y desproporcionada del combustible y los recursos mundiales.
Dejemos constancia de las palabras idílicas con que pretendía engatusar a los hombres de Estado allí reunidos:
"No hay ni una línea recta, ni un solo camino hacia el éxito, venimos de distintas culturas y tenemos distintas historias; pero no podemos olvidar que cuando nos reunimos aquí como jefes de distintos gobiernos, representamos a ciudadanos que comparten las aspiraciones básicas, las mismas: vivir en dignidad y en libertad; tener educación y lograr las oportunidades; amar a sus familias, y amar y venerar a sus dioses; vivir en una paz que hace que la vida valga la pena ser vivida; la naturaleza de un mundo imperfecto hace que hayamos aprendido estas lecciones cada día."
"... porque los que vinieron antes que nosotros creían que la paz es mejor que la guerra, y la paz es mejor que la represión, y que la prosperidad es mejor que la pobreza. Ese es el mensaje que viene, no de las capitales, sino de los pueblos, de la gente, y cuando el pilar de esta institución se fundó, Truman vino y dijo: Las Naciones Unidas básicamente es la expresión de la naturaleza moral de las aspiraciones del ser humano. Vivimos en un mundo que cambia a una gran velocidad, esta es una lección que nunca debemos olvidar. La paz es difícil, pero sabemos que es posible, por eso es que juntos debemos decidirnos para que esto sea definido por las esperanzas y no los temores. Juntos debemos lograr la paz, una paz que sea duradera.
"Muchísimas gracias."
Escucharlas hasta el final merece algo más que gratitud; merece un premio.
Como ya expresé, en las primeras horas de la tarde correspondió el uso de la palabra a Evo Morales Ayma, presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, quien entró rápidamente en los temas esenciales.
"... hay una clara diferencia sobre la cultura de la vida frente a la cultura de la muerte; hay una clara diferencia sobre la verdad frente a la falsedad, una profunda diferencia de la paz frente a la guerra."
"... siento que va a ser difícil entendernos con políticas económicas que concentran el capital en pocas manos. Los datos demuestran que el 1% de la población en el mundo concentra el 50% de las riquezas. Si hay esas profundas diferencias, ¿cómo podría resolverse la pobreza? Y si no acabamos con la pobreza, ¿cómo podría garantizarse una paz duradera?"
"De niño me acuerdo perfectamente que antes, cuando había una rebelión de los pueblos contra un sistema capitalista, contra los modelos económicos de saqueo permanente de nuestros recursos naturales, a los dirigentes sindicales, a los líderes políticos de tendencia izquierdista les acusaban de comunistas para detenerlos; a las fuerzas sociales las intervenían militarmente: confinamientos, exilios, matanzas, persecuciones, encarcelamientos, acusados de comunistas, de socialistas, de maoístas, de marxista-leninistas. Siento que eso ahora ha terminado, ahora ya no nos acusan de marxista-leninistas, sino ahora tienen otros instrumentos como el narcotráfico y el terrorismo... "
"... preparan intervenciones cuando sus presidentes, cuando sus gobiernos, cuando los pueblos no son procapitalistas ni proimperialistas."
"... se habla de una paz duradera. ¿Cómo puede haber una paz duradera con bases militares norteamericanas? ¿Cómo puede haber paz duradera con intervenciones militares?"
"¿Para qué sirven estas Naciones Unidas, si aquí un grupo de países deciden intervenciones, matanzas?"
"Si quisiéramos que esta organización, las Naciones Unidas, tenga autoridad para hacer respetar las resoluciones, pues tenemos que empezar a pensar en refundar las Naciones Unidas... "
"Cada año en las Naciones Unidas deciden —casi el ciento por ciento de las naciones, excepto Estados Unidos e Israel— desbloquear, acabar con el bloqueo económico a Cuba, ¿y quién hace respetar eso? Por supuesto, el Consejo de Seguridad jamás va a hacer respetar esa resolución de Naciones Unidas [... ] No puedo entender cómo en una organización de todos los países del mundo sus resoluciones no se respetan. ¿Qué es Naciones Unidas?"
"Quiero decirles que Bolivia no está de espaldas al reconocimiento de Palestina en Naciones Unidas. Nuestra posición es que Bolivia da la bienvenida a Palestina a las Naciones Unidas."
"Ustedes saben, amables oyentes, que yo vengo del Movimiento Campesino Indígena, y nuestras familias cuando hablan de una empresa se piensa que la empresa tiene mucha plata, carga mucha plata, son millonarios, y no podían entender cómo una empresa pida al Estado, que se le preste plata para la inversión correspondiente."
"Por eso digo que estas entes financieras internacionales son las que hacen negocio mediante las empresas privadas; ¿pero quiénes tienen que pagar eso? Justamente son los pueblos, los Estados."
"... Bolivia con Chile, tenemos una demanda histórica para retornar al mar con soberanía al Pacífico, con soberanía. Por eso, Bolivia ha tomado la decisión de acudir a tribunales internacionales, para demandar una salida útil soberana al océano Pacífico.
"La Resolución 37/10 de la Asamblea General de la ONU, 15 de noviembre de 1982, establece que ‘acudir a un Tribunal Internacional de Justicia para resolver litigios entre Estados no debe ser considerado como un acto inamistoso.’
"Bolivia se ampara en el derecho y la razón para acudir a un Tribunal Internacional, porque su enclaustramiento es producto de una guerra injusta, una invasión. Demandar una solución en el ámbito internacional representa para Bolivia la reparación de una injusticia histórica.
"Bolivia es un Estado pacifista que privilegia el diálogo con los países vecinos, y por ello mantiene abiertos los canales de negociación bilateral con Chile, sin que ello signifique renunciar a su derecho de acudir a un Tribunal Internacional... "
"Los pueblos no son responsables del enclaustramiento marítimo de Bolivia, los causantes son las oligarquías, las transnacionales que como siempre se adueñan de sus recursos naturales.
"El Tratado de 1904 no aportó a la paz ni a la amistad, ocasionó que por más de un siglo Bolivia no acceda a un puerto soberano."
"... en la región América se gesta otro movimiento de los países de Latinoamérica con el Caribe, yo diría una nueva OEA sin Estados Unidos, para liberarnos de ciertas imposiciones, felizmente, con la pequeña experiencia que tenemos en UNASUR. [... ] ya no necesitamos, si hay algún conflicto de países [... ] que vengan desde arriba y afuera a poner orden."
"También quiero aprovechar esta oportunidad sobre un tema central: la lucha contra el narcotráfico. La lucha contra el narcotráfico es usado por el imperialismo norteamericano con fines netamente políticos. La DEA de Estados Unidos en Bolivia no luchaba contra el narcotráfico, controlaba el narcotráfico con fines políticos. Si había algún dirigente sindical, o había algún dirigente político antiimperialista, para eso estaba la DEA: para implicarlo. Muchos dirigentes, muchos políticos nos salvamos de esos trabajos tan sucios desde el imperio para implicarnos en el narcotráfico. Hasta ahora siguen todavía intentándolo."
"Las semanas pasadas decían algunos medios de comunicación desde Estados Unidos, que el avión de la presidencia estaba detenido con rastros de cocaína en Estados Unidos. ¡Qué falso!, tratan de confundir a la población, tratan de hacer una campaña sucia contra el gobierno, incluso contra el Estado. Sin embargo, ¿qué hace Estados Unidos? Descertifica a Bolivia y a Venezuela. ¿Qué autoridad moral tiene Estados Unidos para certificar o descertificar a los países en Suramérica o en Latinoamérica?, cuando Estados Unidos es el primer consumidor de drogas del mundo, cuando Estados Unidos es uno de los productores de marihuana del mundo, primer productor de marihuana del mundo [... ] ¿Con qué autoridad puede certificar o descertificar? Es otra forma de cómo amedrentar o intimidar a los países, tratar de escarmentar a los países. Sin embargo, Bolivia, con mucha responsabilidad, va luchando contra el narcotráfico.
"En el mismo informe de Estados Unidos, es decir, del Departamento de Estado de Estados Unidos reconoce una reducción neta del cultivo de coca, que ha mejorado la interdicción.
"¿Pero dónde está el mercado? El mercado es el origen del narcotráfico y el mercado está aquí. ¿Y quién descertifica a Estados Unidos porque no ha bajado el mercado?
"En la mañana, el presidente Calderón, de México, decía que el mercado de la droga sigue creciendo y por qué no hay responsabilidades para erradicar el mercado. [... ] Hagamos una lucha bajo una corresponsabilidad compartida. [... ] En Bolivia no tenemos miedo, y hay que acabar con el secreto bancario si queremos hacer una lucha frontal contra el narcotráfico."
"... Una de las crisis, al margen de la crisis del capitalismo, es la crisis alimentaria. [... ] tenemos una pequeña experiencia en Bolivia: se da créditos a los productores de arroz, maíz, trigo y soya, con cero por ciento de interés, e incluso ellos pueden pagar con sus productos su deuda, se trata de alimentos; o créditos blandos para fomentar la producción. Sin embargo, las bancas internacionales nunca toman en cuenta al pequeño productor, nunca toman en cuenta las asociaciones, las cooperativas, que muy bien pueden aportar si se les da la oportunidad. [... ] Tenemos que terminar con el comercio llamado de competitividad.
"En una competencia, ¿quién gana?, el más poderoso, el que tiene más ventajas, siempre las transnacionales, ¿y qué es del pequeño productor?, ¿qué es esa familia que quiere surgir con su propio esfuerzo? [... ] En una política de competitividad seguramente nunca vamos a resolver el tema de la pobreza.
"Pero, finalmente, para terminar esta intervención quiero decirles que la crisis del capitalismo ya es impagable. [... ] La crisis económica del capitalismo no solo es coyuntural, sino es estructural, ¿y qué hacen los países capitalistas o los países imperialistas?, buscan cualquier pretexto para intervenir en un país y para recuperar sus recursos naturales.
"Esta mañana el Presidente de Estados Unidos decía que Iraq ya se liberó, se van a gobernar ellos. Los iraquíes podrán gobernarse, ¿pero el petróleo de los iraquíes en manos de quién está ahora?
"Saludaron, dijeron que se acabó la autocracia en Libia, ahora es la democracia; puede haber la democracia, ¿pero el petróleo de Libia en manos de quién quedará ahora? [...] los bombardeos no eran por culpa de Gaddafi, por culpa de unos rebeldes, sino que es buscando el petróleo de Libia."
"... Por tanto, su crisis, la crisis del capitalismo, la quieren superar, la quieren enmendar recuperando nuestros recursos naturales, en base a nuestro petróleo, en base a nuestro gas, nuestros recursos naturales.
"... tenemos una enorme responsabilidad: defender los derechos de la Madre Tierra."
"... la mejor forma de defender los derechos humanos es ahora defendiendo los derechos de la Madre Tierra [... ] aquí tenemos una enorme responsabilidad de aprobar los derechos de la Madre Tierra. Recién hace 60 años aprobaron la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Recién hace 60 años atrás se han dado cuenta en las Naciones Unidas que también el ser humano tiene sus derechos. Después de los derechos políticos, los derechos económicos, los derechos de los pueblos indígenas, ahora tenemos la enorme responsabilidad de cómo defender los derechos de la Madre Tierra.
"También estamos convencidos de que el crecimiento infinito en un planeta finito es insostenible e imposible, el límite del crecimiento es la capacidad degenerativa de los ecosistemas de la Tierra. [... ] hacemos un llamado a [... ] un nuevo decálogo de reivindicaciones sociales: en sistemas financieros, sobre los recursos naturales, sobre los servicios básicos, sobre la producción, sobre la dignidad y la soberanía, y con esta base empezar a refundar a las Naciones Unidas para que las Naciones Unidas sean la máxima instancia para la solución en temas de paz, en temas de pobreza, en temas de dignidad y soberanía de los pueblos del mundo."
"Esperamos que esta experiencia vivida como Presidente pueda servir de algo para todos nosotros, como también yo vengo a aprender de muchos de ustedes para seguir trabajando por la igualdad y la dignidad del pueblo boliviano.
"Muchísimas gracias."
Después de los medulares conceptos de Evo Morales, el Presidente de la Autoridad Nacional Palestina Mahmud Abbas, al que concedieron el uso de la palabra dos días después, expuso los dramáticos sufrimientos de los habitantes de Palestina: "... la crasa injusticia histórica perpetrada con nuestro pueblo, por ello se convino establecer el Estado de Palestina en solo un 22% del territorio de la Palestina y, sobre todo, el territorio palestino que ocupó Israel en 1967. Tomar ese paso histórico, que aplaudieron los Estados del mundo, permitió condescender sobremanera para lograr una contemporización histórica, que permitiría que se lograra la paz en la tierra de la paz."
"[... ] Nuestro pueblo continuará con la resistencia pacífica popular a la ocupación de Israel, sus asentamientos y su política de apartheid, así como la construcción del muro de anexión racista [... ] armado con sueños, valor, esperanza y lemas ante la faz de tanques, gas lacrimógeno, buldóceres y balas."
"... queremos darles la mano al gobierno y al pueblo israelí para la imposición de la paz, y les digo: construyamos juntos, de manera urgente, un futuro para nuestros hijos en el que puedan gozar de libertad, de seguridad y de prosperidad. [... ] Construyamos relaciones de cooperación que se basen en la paridad, la equidad y la amistad entre dos Estados vecinos, Palestina e Israel, en vez de políticas de ocupación, asentamientos, guerra y eliminación del otro."
Ha transcurrido casi medio siglo desde aquella brutal ocupación promovida y apoyada por Estados Unidos. Sin embargo, apenas transcurre un día sin que el muro se levante, monstruosos equipos mecánicos destruyan viviendas palestinas y algún joven, e incluso adolescente palestino, caiga herido o muerto.
¡Cuán profundas verdades contenían las palabras de Evo!
Fidel Castro Ruz
Septiembre 26 de 2011
10 y 32 p.m.

Por una falta no cometida
13 años de reclusión injusta contra los 5
Minerva Flores Torres
LINK EN LA WEB:
53 años nadando a contracorriente, en un mundo atado de manos y silenciado por Estados Unidos; luchando por el derecho a vivir como ha decidido hacerlo; ése ha sido el gran delito del pueblo cubano desde el triunfo de su Revolución.
Más de cinco décadas resistiendo el embargo económico impuesto por el imperialismo y más de 10 lustros sorteando el terror en todas su formas, y aún están de pie.
Infiltrar al enemigo fue un recurso para evitar más atentados en su contra. “No había alternativa, teníamos que hacerlo. El deber más elemental y sagrado de cualquier Estado es defenderse y defender a su gente. Nosotros no hacemos lo que se hace ahora por todas partes, ir a la guerra preventiva. Ahora, se lucha con inteligencia, con valor, pacíficamente”, afirmó, en entrevista con buzos el presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba (ANPP), Ricardo Alarcón de Quesada, en defensa de Los cinco intelectuales cubanos presos por luchar contra el terrorismo, acción que los guerreristas norteamericanos deberían premiar, en vez de castigar.
Peligrosa misión
No hay mayor injusticia que purgar una pena por una falta no cometida. Trece años recluidos, 4 mil 766 días presos, 114 mil 384 horas privados de su libertad, 6 millones 863 mil minutos sin recibir, varios de ellos, la visita de algún familiar, 411 millones 782 mil 400 segundos sin la posibilidad de disfrutar los mejores años de su vida, suman, hasta el día de hoy, los 65 años que entre Gerardo Nordelo Hernández (Manuel Viramontes), René González Sehwerert, Antonio Guerrero Rodríguez, Fernando González Llort (Rubén Campa) y Ramón Labañino Salazar (Luis Medina), mejor conocidos como Los cinco, han pagado por defender a los pueblos cubano y estadounidense de un nuevo ataque terrorista.
Ricardo Alarcón de Quesada (RAQ): La misión de estos compañeros era tratar de penetrar grupos terroristas para descubrir sus planes a tiempo e informar al gobierno de Cuba. Ellos no fueron acusados de terrorismo, los acusan de haber ido a Miami para luchar contra el terrorismo, que no es lo mismo ni se escribe igual. Eso es algo muy difícil de entender porque a nadie se le ocurriría pensar que en estos años, en que la gran moda es la lucha contra el terrorismo a escala internacional, y se ha convertido, aparentemente, en una religión para Estados Unidos (EE. UU.), estas personas fueran acusadas por eso. El terrorismo contra Cuba ha existido durante medio siglo con la tolerancia de los medios y a veces con la complicidad de las autoridades norteamericanas; el caso de Los cinco es la mejor prueba.
50 años de terror contra la Isla
De enero de 1959 hasta el 12 de septiembre de 1998, fecha de aprehensión en Miami de los enviados del gobierno cubano, grupos extremistas del exilio contrarrevolucionario como Hermanos al Rescate, Alpha 66, la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), Comando F-4, entre otros, habían realizado una serie de atentados que se recrudecieron en la década de los años 90 y cuya autoría habían aceptado explícitamente y sin ningún temor terroristas confesos y miembros de estas organizaciones como Orlando Bosch, Luis Posada Carriles, Hernán Ricardo, Freddy Lugo y secuaces. De acuerdo con información vertida por el ex Presidente cubano y Comandante en jefe Fidel Castro Ruz en la tribuna antiimperialista “José Martí”, los últimos atentados más significativos contra la Isla se realizaron en hoteles cubanos.
Durante el año 1997 explotó una bomba en la discoteque “Aché” del hotel Meliá Cohíba, acción ejecutada por la FNCA; fuerzas especializadas del Ministerio del Interior desactivaron una carga explosiva descubierta en el piso 15 del mismo Meliá; el 12 de junio se produjeron dos explosiones simultáneas en las hosterías Capri y Nacional donde cuatro personas resultaron heridas; el 4 de agosto vuelve a ocurrir una explosión terrorista en el Meliá. Una semana después la Junta de Directores de la FNCA declaró públicamente que respaldaba “sin ambages ni reparos los incidentes de rebeldía interna que durante las últimas semanas se vienen sucediendo a través de la Isla”. El 4 de septiembre acaecieron detonaciones importantes en los hoteles Copacabana, Chateau y Tritón, donde murió el italiano Fabio di Celmo; un estallido más devino en el restaurante La Bodeguita del Medio.
Los planes de atentados no cesarían ahí. El gobierno cubano, en aquel momento poseía vasta información que hizo llegar al entonces Presidente de EE. UU., William Clinton, a través del escritor colombiano Gabriel García Márquez, al mismo tiempo que cableaba al gobierno norteamericano a través de la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana (SINA).
Héroes de la República
Tras intensos intercambios informativos entre ambos gobiernos, del 16 al 17 de junio de 1998 “se efectuaron varias reuniones conjuntas en La Habana entre expertos cubanos y oficiales norteamericanos del Buró Federal de Investigación (FBI) sobre el tema de los planes de atentados terroristas. Se entregó a la delegación norteamericana del FBI abundante información documental y testimonial. Los materiales entregados incluían 64 folios en los que se aportaban elementos investigativos acerca de 31 acciones y planes terroristas contra nuestro país, ocurridos entre 1990 y 1998. En la mayor parte de estas acciones estaba vinculada la FNCA que, además, organizó y financió los más peligrosos, especialmente los ejecutados por la estructura terrorista dirigida por Luis Posada Carriles en Centroamérica.
“Los oficiales del FBI recibieron también 60 folios con las fichas de 40 terroristas de origen cubano, la mayoría residentes en Miami, incluidos los datos para su ubicación. Se llevaron, además, tres muestras de sustancias explosivas de dos gramos cada una, de las bombas desactivadas antes de explotar en el Hotel Meliá Cohíba el 30 de abril de 1997 y en un microbús de turismo el 19 de octubre de 1997, así como del artefacto explosivo en posesión de dos terroristas guatemaltecos el 4 de marzo de 1998.
“Se entregaron, además, cinco casetes de video y ocho de audio con declaraciones de los terroristas centroamericanos arrestados por la colocación de bombas en los hoteles, en los cuales revelan sus vínculos con organizaciones terroristas cubanas que operan desde Estados Unidos y en particular con Luis Posada Carriles.
“La parte norteamericana reconoció el valor de la información recibida y se comprometió a dar respuesta del análisis realizado a estos materiales en el más breve plazo.
“Transcurrieron extrañamente casi tres meses sin la respuesta seria prometida. Se recibieron sólo algunas noticias intrascendentes”, así lo dio a conocer Castro Ruz en aquella ocasión.
RAQ: Se les entregó cuantiosa información; agradecieron la entrega; dijeron: “bueno, tenemos que analizarla, nosotros les respondemos”. Eso fue en junio de 1998. Es el tiempo que ha pasado, nunca llegó la respuesta de ellos, excepto que detuvieron a los cinco compañeros. En lugar de actuar contra los grupos terroristas, investigaban a los antiterroristas.
Según palabras del Comandante -“los cinco compañeros, hoy Héroes de la República de Cuba, constituían la principal fuente de información sobre las actividades terroristas contra nuestro país”, aun cuando, ninguna de la información proporcionada los ligaba o los ponía al descubierto. Por el contrario, varios de los terroristas confesos, a la fecha, continúan libres y radicando en suelo norteamericano.
Acusación ambigua
Gerardo, Ramón y Antonio fueron acusados de “conspirar para cometer espionaje”, no de cometerlo, pero la sentencia original para cada uno de ellos fue la cadena perpetua, es decir, la pena máxima que se le impone al espía. A Gerardo, jefe del grupo, se le agregó una cadena perpetua por “conspirar para cometer asesinato en primer grado” por el suceso ocurrido el 24 de febrero de 1996. Fernando y René fueron acusados por delitos menores, pero condenados con exagerados dictámenes.
RAQ: La figura jurídica de “conspiración para cometer espionaje” fue la que el imperio empleó durante toda la Guerra Fría con los comunistas, la gente de izquierda y los sindicalistas de aquella época. A ninguno lo acusaron de haber hecho nada malo sino de conspirar para hacerlo, que es una cosa diferente.
Sentencia absurda
Luego de estar encerrados en cárceles de máxima seguridad y estar en confinamientos solitarios por más de 17 meses, mejor conocidos como “hueco” (lugar de castigo para los presidiarios que cometen infracciones dentro del penal), y separados unos de otros por kilómetros de distancia, a pesar de no haber cometido algún delito ni afuera ni adentro de la prisión, y después de haber sido hallados culpables, fueron sentenciados con condenas que sumaban cuatro cadenas perpetuas, más 77 años de prisión: Manuel Viramontes (Gerardo Nordelo), dibujante, caricaturista y licenciado en Relaciones Políticas Internacionales (RPI), a dos cadenas perpetuas, más 15 años; Luis Medina (Ramón Labañino), economista y graduado con Diploma de Oro en la Universidad de La Habana, a una cadena perpetua más 18 años; Antonio Guerrero, poeta e ingeniero en construcción de aeródromos en la Universidad Técnica de Kiev, a una cadena perpetua, más 10 años; Fernando González (Rubén Campa), también licenciado en RPI y graduado con Diploma de Oro en el Instituto Superior de Relaciones Internacionales del Ministerio de Relaciones Exteriores, a 19 años, y René González, piloto e instructor de vuelo, a 15 años de cárcel. Antonio y René nacieron en Estados Unidos y criados en Cuba.
RAQ: Hubo un delito que ellos reconocieron: eran agentes de Cuba y no se lo habían dicho al gobierno estadounidense, pero si se lo hubieran dicho no hubieran podido cumplir su misión. Aceptamos que fue una falta, pero déjeme decirle que, en EE. UU., todos los días ocurre algo parecido. Agentes extranjeros pueden serlo de una compañía o firma extranjera, una institución extranjera; y hay muchas en el mundo. Por esa infracción ameritaría una multa o, como castigo máximo concebible, cinco años de prisión, pero no creo que alguien haya cumplido prisión por eso.
Ellos son agentes nuestros y nunca lo negaron. Infiltrados en el sentido de la misión que realizaron: colarse dentro de esos grupos, por supuesto no diciéndoles que estaban ahí en nombre de la Revolución Cubana, sino haciéndose pasar por anticastristas y metiéndose por esos medios. Por esas vías se enteraban de planes, de cosas, nos alertaban y nosotros le trasladábamos esa información al FBI, al gobierno estadounidense, pero éste, en lugar de actuar contra los criminales, actuó contra ellos por una decisión realmente incalificable.
El espionaje contra EE. UU. hubiera sido si usted infiltra a alguien en el Pentágono, en el Departamento de Estado, en la Casa blanca y se apodera de documentos secretos del Estado y se los transmite a un gobierno extranjero, no entre esta chusma de Miami; eso no es espionaje, es otra cosa, es descubrir los planes de esa gente.
Habeas Corpus, último recurso
La Corte de Apelaciones de Atlanta, en el año 2005, determinó que las condenas a perpetuidad eran exageradas por ese cargo de “conspiración para cometer espionaje”. Entonces, decidió que los casos de Antonio y de Ramón había que revisarlos y ponerles una más baja. Curiosamente, ese acuerdo reconoció que esa misma situación la afrontaba Gerardo; entonces, concluyó: “como ya tiene una cadena perpetua no tiene sentido quitarle ésta, que se quede con sus dos cadenas perpetuas”. En resumen, todo lo que dijeron era un verdadero absurdo.
Tras las múltiples apelaciones, la corte de Distrito de Miami reconsideró la sentencia luego de admitir que no existía evidencia de obtención ni de transmisión de información secreta, por lo que en el caso de Antonio se le impuso el castigo de 21 años y 10 meses en prisión, más 5 años de “libertad” supervisada; a Fernando González se le redujo a 17 años y nueve meses, y a Ramón a 30 años de prisión.
Los cinco presos políticos han agotado todas las instancias legales (el Tribunal Federal del Distrito Sur de la Florida, la Corte de Apelaciones en Atlanta, Georgia y el Tribunal Supremo Federal, última y máxima instancia que revisa solamente los casos que ella decide, el de Los cinco se negó a examinarlo) y se encuentran en la fase del Habeas Corpus, recurso último de apelación extraordinario en el que solicitan a la jueza que los condenó en primera instancia, Joan A. Lenard, una nueva revisión de su caso, donde deberán presentar nuevas pruebas que no se hayan esgrimido con anterioridad.
El gobierno de EE. UU. pidió a la Corte que fueran rechazadas las solicitudes de Habeas Corpus de Gerardo, Antonio y René y que no se le conceda la audiencia que solicitan. Ellos presentaron sus réplicas y ahora está en manos de la Corte aceptar o no estas mociones. Fernando y Ramón están aún en el proceso de presentar sus mociones.
La Corte hace unos días rechazó la Moción para Modificar las Condiciones de la Libertad Supervisada presentada por René, en febrero de este año, donde solicitaba poder regresar a Cuba tras ser liberado (7 de octubre. Por buena conducta salió antes del tiempo castigado.) y no tener que cumplir los tres años de “libertad” supervisada en EE. UU.
Los enemigos de Cuba
RAQ: El enemigo del pueblo cubano es el imperialismo norteamericano, el que se ha negado a admitir que Cuba es un país libre, independiente, sobre el cual no tiene ningún derecho. Pero el enemigo en un sentido más de carne y hueso son estos elementos de la extrema derecha cubanoamericana que han vivido toda su vida practicando la violencia contra el pueblo cubano, lo que llamamos acá, la mafia contrarrevolucionaria, asentada, sobre todo, en la ciudad de Miami, Florida.
No hay que olvidar que personas que escaparon de Cuba hacia EE. UU. al triunfo de la Revolución en enero de 59 eran los antiguos torturadores y matarifes del régimen de Fulgencio Batista.
Hay gente que ha vivido medio siglo con el sueño de regresar, de recuperar sus fincas, sus propiedades, volver a instalarse aquí y a dominar este país.
No todos los elementos conservadores han coincidido en darle apoyo, aval moral y político a estos grupos de ultraderecha; yo creo que éstos ni siquiera son eso, son cosas peores. Estamos hablando realmente de grupos de bandidos, de los que agotaron el tesoro nacional, de los que se robaron los fondos de la República y se fueron con las manos ensangrentadas. Ninguno fue procesado por ladrón ni por asesino en ese país. Desde 1959 ellos han contado con el apoyo oficial y político de todas las administraciones estadounidenses y de toda la derecha mundial. Para la nación norteamericana, el triunfo de la Revolución Cubana fue un shock que ha sido imposible de asimilar.
Cuba realmente pasó de ser colonia de España a colonia norteamericana y de pronto se les fue, se disolvió así por una insurrección popular, unos guerrilleros, qué sé yo. Desde entonces han estado viviendo una situación completamente anormal, en la que no han faltado cosas peores como es el terrorismo.
Rabia y venganza de la mafia
RAQ: A Gerardo Nordelo, quien purga el castigo más grande, además, lo acusan de conspiración para cometer asesinato en primer grado; de haber sido parte de una conspiración para asesinar a varias personas, no de haber asesinado a alguien. Esto se refiere al incidente que hubo el 24 de febrero de 1996, cuando las avionetas del grupo terrorista de Miami Hermanos al Rescate fueron derribadas, aquí, frente al Malecón de La Habana. En los últimos 20 meses anteriores habían hecho esa gracia 25 veces y se les había advertido que no se les iba a tolerar más, que se iba a impedir que se violara el espacio cubano. Ese día era de fiesta nacional: el inicio de la última guerra de Independencia de Cuba. Era el último sábado de Carnaval. En el malecón habanero había cientos de personas disfrutando una competencia deportiva a lo largo de la costa.Era realmente muy peligroso que entrasen unas avionetas de un grupo de esta índole y con esta historia en Cuba. El gobierno cubano los había alertado durante mucho tiempo, por eso, ese día, las dos avionetas que entraron a espacio aéreo cubano fueron tumbadas.
Gerardo Hernández Nordelo no tiene absolutamente nada qué ver con eso. Él estaba en Miami ese día, pero no estaba en la Torre de Control del aeropuerto, él no estaba piloteando ningún avión.
buzos (b): Entonces, ¿por qué ensañarse con él?
A él le adjudican primero esta acusación adicional (conspiración para cometer asesinato en primer grado) en la prensa de Miami, donde ya se hablaba hasta por los codos de acusarlo de eso, antes de que lo hiciera la Fiscalía. Yo creo que eso fue claramente una jugarreta del gobierno estadounidense; posiblemente concebida para darle satisfacción a los grupos más agresivos de la mafia de Miami.
Por aquellos mismos días, cuando nuestros compañeros fueron arrestados y cuando se iba a iniciar el juicio contra ellos, estaba ocurriendo el suceso de Elián González (el niño balsero sustraído por su madre sin el consentimiento del padre, para huir hacia Miami, donde pretendía obtener asilo político). Elián regresa a Cuba justamente cuando se inició el proceso contra Los cinco. Entonces, la frustración, la rabia, que esto provocó en los círculos de Miami fue enorme. El caso de Elián fue desastroso para esa mafia porque el mundo entero descubrió la naturaleza de esos grupos, capaces de secuestrar a un niño, de desacatar las órdenes del Presidente estadounidense de devolverlo a Cuba, y de desacatar la decisión de los tribunales hasta que, finalmente, eso llegó hasta el Supremo. Perdieron en todos los niveles y, sobre todo, perdieron ante la opinión pública norteamericana.
La acusación contra Gerardo puede verse como un intento de compensar a esa gente, de darles lo que ellos estaban reclamando. En todo el proceso no existió prueba alguna ni evidencia que lo vinculase a él con ese lamentable incidente del 24 de febrero y no se presentó ninguna, por eso es que a él no lo acusan de asesinato, si no de conspiración para cometerlo.
Pero aún hay otra cuestión. Él era, como jefe de grupo, quien tenía la comunicación con La Habana; entonces, en algunas de estas comunicaciones se mencionó aquel incidente, que tuvo mucho peso en la relación entre Cuba y EE. UU., pero no el plan para derribar los aviones, ningún asesinato, sino sólo se menciona. Pero esto lo utiliza la Fiscalía como supuesta prueba de que Gerardo tuvo que ver con ese hecho.
Ahora fíjese, hay una cosa muy importante, que le da al caso de Gerardo y a la acusación ese carácter realmente único. En mayo de 2001, el gobierno norteamericano reconoció por escrito que había fracasado en esa acusación. Ellos, al final, cuando se está acabando el juicio (el veredicto lo dicta el tribunal, en junio de 2001), el 24 mayo, cuando va a terminar la parte de discusión, de debate, el gobierno pide modificar la acusación contra Gerardo porque no podía probarla. La jueza, con buen sentido, le dice que no, que es muy tarde y que han pasado siete meses discutiendo el incidente del 24 de febrero y que ése había sido el centro del juicio.
Por tanto, si al jurado no lo convencieron, pues perdieron. Entonces, el gobierno acudió ante la Corte de Apelaciones. (Hay un documento del gobierno por escrito, dirigido a la Corte Superior, en el que reconoce que no podía probar esa acusación y que en consecuencia el acusado iba a ser absuelto y, entonces, se le caía todo). La Corte no aceptó cambiar la acusación y, sin embargo, el jurado lo encontró culpable.
Dos pruebas irrefutables
RAQ: He dicho con toda claridad que Gerardo no tuvo nada qué ver con el incidente de las avionetas. Sin embargo, considerando que el incidente tuvo lugar, como decimos nosotros, en aguas cubanas, la jueza Lenard tampoco tenía algo que ver en él. Para que EE. UU. o un tribunal norteamericano pudiera tratar un hecho como este, éste debió haber ocurrido en aguas internacionales o en el territorio estadounidense. Si fue en otra región no tenía jurisdicción alguna. El último informe de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), cuando hizo una investigación sobre ese incidente se encontró con un problema: los radares cubanos decían una cosa y los radares norteamericanos, otra,  y algunos otros no funcionaron. Pero bueno, el caso es que había una disputa entre dos países sobre dónde ocurrió el percance. La OACI le pidió al gobierno de estadounidense que le entregara las imágenes de los satélites que tiene dándole la vuelta al planeta todos los días filmando todo lo que pasa en esta parte del mundo. Ellos tienen todas estas imágenes, pero por una extraña razón se negaron a entregarlas a los investigadores de la Organización de las Naciones Unidas.
El abogado de Gerardo presentó una moción solicitando el expediente del satélite. La Fiscalía se negó y la jueza apoyó al gobierno. Desde entonces, desde hace 15 años, la defensa de Gerardo está reclamando que se presenten esas imágenes. Ahora mismo la respuesta del gobierno es que no va a entregarlas. ¿A usted no le parece sospechoso eso?
Otro aspecto, a mi juicio, todavía más notable, porque es completamente nuevo y abona argumentos a los Habeas Corpus rechazados, es que, en el año 2006, después de que se había agotado ya la apelación en Atlanta, se descubrió que el gobierno de Estados Unidos se había gastado centenares de miles de dólares del presupuesto federal para pagarle a esos periodistas de Miami que hicieron esa tremenda campaña contra Los cinco. Aunque la Corte de Apelaciones falló favorablemente en 2005, declarando nulo el juicio por el ambiente hostil de Miami; el veredicto fue revertido por presión de la administración Bush. Ahí está un documento importante en que tres jueces norteamericanos califican el ambiente del juicio como una “tormenta perfecta de prejuicios e ilegalidad”. Lo que no sabían ellos era que esa tormenta había sido alimentada por el gobierno, que era el que había pagado a los periodistas que armaron todo.  Ése es un elemento completamente nuevo. Se sabía de la campaña de prensa, la jueza protestó, la defensa lo usó como argumento, pero lo que nadie sabía era que esa prensa fue pagada por el gobierno.
Como ahora se prueba en los documentos obtenidos por el periódico Liberation (buzos posee copias de algunos de ellos).
Silencio criminal en EE. UU.
RAQ: El principal obstáculo que hemos enfrentado en este proceso es el cerco mediático, el desconocimiento de este caso, la falta de información. Si eso lo supiera toda la gente en EE. UU. sería un escándalo y obligarían al Presidente, al que estuviese ahí, a liberar a los inocentes inmediatamente. Para ellos la gente no debe saberlo y por eso los medios no informan, no hablan de esto, no explican la verdad; porque todo esto generaría titulares de primera plana; esto que yo le acabo de decir sería un titular en el periodismo más clásico. Exclusivamente se habló hasta por los codos en Miami, pero para amedrentar al tribunal con un ambiente insostenible; todo eso se sabe ya en Miami, pero en el resto del país, silencio absoluto, ni siquiera se sabe que existe Cuba.
La última posibilidad
b: ¿Hay alguna posibilidad de negociar la liberación de Los cinco?
RAQ: El presidente Raúl Castro lo dijo en alguna ocasión y como muestra de voluntad se liberaron a los ciudadanos que estaban detenidos y eran presentados internacionalmente como presos políticos. Los soltamos a todos y, sin embargo, Barack Obama fue incapaz de tener un gesto semejante.
Ha habido realmente un nivel de solidaridad, de respaldo internacional creciente, el problema está en lograr crear un movimiento semejante en Estados Unidos, en la sociedad norteamericana, que obligue, que estimule al presidente Obama a hacer lo que tiene que hacer: ordenar la libertad de Los cinco, ¡¡ya!!

Carta abierta al presidente Barack Obama sobre René González y los cinco cubanos
por Arnold August
Durante los días 7, 8 y 9 de Octubre de 2011, el Centro Cultural Vanier Richelieu en Ottawa (Canadá) alberga a miembros de la comunidad hispanohablante y de las naciones originarias residentes en las provincias de Ontario, Quebec y la Columbia Británica, durante la realización del Foro “Nuestra América: Realidad, Identidad y Cultura”. El  8 de octubre, Arnold August, miembro del Comité Internacional y del Comité Fabio Di Celmo (Quebec), entregó la siguiente Carta Abierta   a los casi 100 activistas en el Foro de las comunidades indígenas y latinoamericanas en Canadá provenientes de Vancouver, Toronto, Ottawa y Montreal, y fue aceptada como una resolución del Foro.
Nosotros, los participantes al 1er. Foro Nuestra América “Realidad, Identidad, Cultura”, Ottawa, Canadá, que tuvo lugar hoy, 8 de octubre 2011, tomamos nota de los hechos siguientes:
Los Cinco cubanos, Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, Fernando González y René González, fueron arrestados en 1998 en Miami, Florida. Se estaban infiltrando en los grupos terroristas que habían, desde allí, hecho atentados contra el pueblo de Cuba durante muchas décadas. El único propósito de los cinco cubanos era exponer las actividades terroristas a las autoridades estadounidenses con el fin de detener el asesinato y destrucción contra los cubanos y propiedad cubana, así como ponerle fin al peligro a la vida de los estadounidenses a causa de estas actividades extremistas e insensatas llevadas a cabo desde su base en Florida.
En lugar de arrestar a los terroristas, los cinco cubanos fueron hecho presos por las autoridades norteamericanas y se les negó un juicio justo. Ellos fueron juzgados en Miami, lugar y nido de actividades anti-Castro, a pesar de la oposición legal y normal de sus abogados para mover el juicio a otra ciudad de Florida. Ha salido a la luz que un juicio justo se vio obstaculizado por el hecho de que los periodistas fueron pagados por organizaciones gubernamentales estadounidenses para avivar los prejuicios y falsa información entre el jurado y la población de Miami. Ellos fueron condenados a largas penas de prisión de hasta dos cadenas perpetuas, más quince años.
A pesar de todos los problemas jurídicos y las peticiones internacionales por su liberación por parte de parlamentarios, organizaciones internacionales de derechos humanos, ganadores del premio Nobel de la paz y otras personalidades, las autoridades de EE.UU. los han mantenido en prisión durante todo este tiempo. Ellos están viviendo en las peores condiciones, pasando una gran cantidad de tiempo en aislamiento. A dos de ellos se les ha negado el derecho de visitas familiares, mientras que para los otros tres, el derecho a visitas se mantiene al mínimo.
René González, fue liberado de prisión el 7 de octubre después de haber cumplido su sentencia completa. Es injusta la obligación de permanecer en los Estados Unidos por tres años bajo un régimen de "libertad supervisada", en lugar de poder volver a su familia en Cuba. Por otra parte, debe pasar este tiempo en Miami, el lugar más peligroso para los cubanos como René.
Él ha sido puesto en libertad hace solo un día y personas en el mundo entero están preocupadas por su seguridad física. Uno puede imaginar cómo su familia se siente en estos momentos.
Por lo tanto, le exigimos al presidente Obama que use sus privilegios constitucionales para enviar René de regreso a Cuba en este momento y ponga en libertad inmediata a los otros cuatro cubanos.
También exigimos que los EE.UU. respeten la solicitud de Venezuela para la extradición del conocido y confeso terrorista Luis Posada Carriles desde Miami a Venezuela para ser juzgado allí por sus crímenes.
Presentado al Foro por Arnold August, miembro del Comité Internacional por la Libertad de los Cinco Cubanos y el Comité Fabio Di Celmo por los Cinco de la Mesa de Concertación de Solidaridad Québec-Cuba.
Fuente: Acción Comunista

Por la libertad plena de René González y su regreso a Cuba
En nombre de los derechos humanos, los Estados Unidos los viola sistemáticamente en su país y en el exterior, provocando destrucción y muerte.
En nombre de la democracia se persigue a quienes reclaman respeto a sus derechos.
En nombre de la lucha contra el terrorismo, los EEUU ejerce el terrorismo de Estado, invade otros países, tortura, asesina, viola el derecho de las personas y los pueblos.
En nombre de la libertad, se restringe e impone el miedo a la libertad.
En nombre de la igualdad, se profundiza la desigualdad entre ricos y pobres, género y color; lo que atenta contra la construcción democrática y la vigencia de los DDHH.
En nombre de la justicia se cometen injusticias, como la aplicada a los 5 cubanos presos en los EEUU, a quienes les impiden la visita de sus esposas e hijos, negándoles las visas durante años, a pesar de los reclamos humanitarios en el mundo.
En nombre de la moral, los EEUU comete la inmoralidad de obligar a Rene González, después de soportar 13 años de prisión injusta con sus compañeros, a permanecer dos años más en los EEUU a merced de quienes quieren destruirlo, violando sus derechos de regresar a Cuba y poder reunirse con su familia y su pueblo.
En nombre de la Verdad, el gobierno de los EEUU privilegia la mentira. Tanta crueldad, sólo puede nacer del odio y la venganza.
En nombre de la seguridad, el pueblo de los EEUU vive mayor inseguridad, control social y mayor iniquidad, guerras y conflictos.
En nombre del derecho, los EEUU viola los derechos de otros pueblos, los pactos y protocolos internacionales.
En nombre de la soberanía y autodeterminación de los pueblos, EEUU busca someter por la fuerza a otros pueblos, vaciando de contenido y valores a la democracia y a las mismas Naciones Unidas.
La resistencia y dignidad de los pueblos, organizaciones sociales y de derechos humanos, reclamamos la libertad inmediata y el regreso a Cuba de Rene González y de los cuatro cubanos que aún permanecen injustamente en prisiones de los EEUU.
Esperamos que el Congreso de los EEUU, el pueblo y el Presidente Barack Obama, tengan la grandeza de actuar con dignidad en bien de la Verdad y la Justicia y el derecho de los pueblos.
La liberación de los 5 es el clamor de los pueblos que luchan por un mundo más justo y fraterno para todos y todas.
Buenos Aires, 11 de octubre de 2011.
Día de la dignidad y resistencia de los pueblos.
http://alainet.org/active/50118

Bloqueo estadounidense provoca pérdidas millonarias a Cuba
O. Fonticoba Gener
Anualmente la economía cubana sufre pérdidas millonarias debido a las afectaciones producidas en el comercio exterior y la inversión extranjera a causa del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el gobierno de los Estados Unidos desde 1962.
Solo por la imposibilidad de acceder al mercado estadounidense con la marca líder de rones cubanos Havana Club, por ejemplo, se han dejado de vender 2 millones 600 mil cajas que, calculadas al precio promedio de facturación del 2010, representan una pérdida superior a los 106 millones de dólares.
Según se conoció en la conferencia de prensa que este viernes diera el viceministro primero de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Orlando Hernández Guillén, ninguna de las supuestas medidas de flexibilización aprobadas por la administración Obama, ha implicado cambios sustanciales en la política norteamericana de bloqueo hacia nuestro país.
La imposibilidad de acceder al mercado norteamericano o de emplear el dólar estadounidense en operaciones financieras son algunas de las prohibiciones mantenidas por la administración de Washington que impactan negativamente sobre el desarrollo del comercio exterior cubano en áreas como la exportación de servicios y de productos tradicionales —ron, tabaco y níquel—, la inversión extranjera y la cooperación internacional.
La industria turística cubana, por ejemplo, se estima dejó de recaudar el año pasado cerca de 1 668 millones de dólares por la prohibición de viajes a la Mayor de las Antillas, tomando como referencia estudios realizados por empresas estadounidenses del turismo.
El bloqueo impuesto al país impide, además, el acceso a tecnología avanzada en posesión de empresas estadounidenses, útil en sectores como el petrolero, la salud y la aviación; al tiempo que impone restricciones para el acceso y conexión internacionales a Internet y otras técnicas asociadas, necesarias para la protección de datos, el pago electrónico, entre otros servicios.
El perjuicio de los vínculos comerciales de Cuba con terceros países es otro de los saldos negativos del bloqueo para el comercio exterior nacional, explicó el vicetitular del ramo.
En ese sentido, Hernández Guillén aclaró que en los últimos tres años las multas impuestas a compañías norteamericanas y de otras latitudes por efectuar transacciones con Cuba superan los 1.100 millones de dólares.
Entre las compañías que recibieron presiones o advertencias de los EE.UU., en el 2010, figuran la organización no gubernamental Cooperación y Educación Médica con Cuba y la organización Global Links, que se dedica a ofrecer asistencia técnica médica en países en desarrollo (Granma Digital).

derechos humanos
Por la defensa del TIPNIS y de la marcha
El Movimiento Franciscano Justicia y Paz, ante los diferentes signos de violencia suscitada en contra de los marchistas en defensa del TIPNIS, deseamos manifestar nuestra opinión al pueblo:
1. Las actitudes prepotentes y autoritarias manifestadas por diversos miembros del gobierno, manifiestan los intereses políticos y económicos y los intereses creados que pervierten la coherencia con los principios y valores morales que proclamaron al inicio del proceso de cambio.
2. La forma de vida de nuestros hermanos indígenas ha sido valorada tradicional, histórica y actualmente por su capacidad de preservar y desarrollar el medio ambiente; por ello, en la Constitución Política del Estado y otras leyes derivadas de ella, se les reconoce ese papel importante y se sujetan los planes de intervención en áreas protegidas y parques al diálogo con ellos.
3. No es con la violencia que se va a llegar a algún acuerdo, sino con razones que deben ser ponderadas, para que, en consenso, se pueda asumir la respuesta más acorde con el Bien común. La posibilidad de diálogo implica elevar el nivel de discernimiento de las emociones a las razones. No se puede denigrar a las personas, ni calumniarlas con denuncias falsas. Toda la campaña mediática y de obstrucción, por parte del gobierno, está manifestando su impotencia para resolver problemas nacionales en diálogo.
4. No se puede alentar la violencia contra la expresión pacífica de la oposición a un proyecto “oficial”, ni condenar las manifestaciones de apoyo moral y de solidaridad económica, por parte de terceros. Con la violencia, el Gobierno está abocado a ganar la batalla, pero perder la guerra moral.
Por todo ello:
1. Pedimos al Estado otorgar las garantías necesarias para que la marcha mantenga la naturaleza pacífica con que se inició.
2. Pedimos al presidente Evo Morales que en su condición de indígena y defensor de la Pachamama, reconocida internacionalmente, no actúe en forma incoherente al plantear el tema como una oposición entre desarrollo y naturaleza, cuando la Madre Naturaleza es nuestra gran riqueza.
3. Pedimos que se realicen los informes técnicos del impacto ambiental y social que provocarán las diferentes propuestas, que se den a conocer a toda la población, pero en base a la verdad: perjuicios y beneficios que aportan a los implicados y a todo el país.
4. Convocamos a todas las personas de buena voluntad al encuentro que se realizará el día jueves, 22 de septiembre, a las 18,30 hrs., en el atrio de la Basílica san Francisco.
La Paz, 13 de septiembre del 2011
 Hno. Bernardo Rada, ofs                 Hno. Carmelo Galdós, ofm
Presidente Departamental                 Presidente Nacional

literatura
‘Los fundadores del alba’, un libro cada vez menos leído
Una mirada a la novela que ganó el premio Casa de Las Américas en 1967
La Razón, domingo, 2 de octubre de 2011
Tendencias
Ricardo Aguilar - La Paz
La novela Los fundadores del alba (1967) del recientemente fallecido escritor potosino Renato Prada Oropeza fue muy importante en su época y es un ejemplo central de la agrupación temática que propuso Luis H. Antezana y denominó la novela de guerrilla. No obstante pocos la leen.
La novela ganó el Premio Casa de las Américas en 1967, sin duda uno de los más importantes de América en el campo literario. Sin desmerecer su relevancia histórica, pues junto a Matías el apóstol suplente de Julio de la Vega, son los mejores ejemplos de las narrativas que exploraron el tópico de la guerrilla, cabe ver ciertos aspectos que, a más de 40 años de su publicación, ya no resultan convincentes y dejaron de emocionar, tal vez por la distancia temporal con la guerrilla de Ñancahuazú y de Teoponte o la imposibilidad de identificación con hechos de la historia de la izquierda en Bolivia.
Los fundadores... es un relato de crecimiento. El personaje central es Javier, un joven burgués que se enrola en una guerrilla (claramente la del Che), abandona el seminario, pues por un momento creyó tener vocación de cura, entra en combate y se enamora profundamente de una campesina; es herido por una bala y cuando finaliza el libro el lector presume su muerte, aunque el narrador “lo deja” agonizando.
Cuando uno lee Los fundadores..., se hace evidente que su estructura narrativa no es ajena a lo que estaba sucediendo en la literatura con el “Boom Latinoamericano”. Tiene juegos temporales que rompen toda cronología, dos narradores (aparece también una narradora personaje que es una prostituta, pero no dura ni dos planas y, en el epílogo, un narrador en segunda persona que cuenta en tiempo futuro), el primero se focaliza en el bando de los guerrilleros y el otro, que es más bien un narrador personaje, en el de los soldados.
Se trata de una estructura con evidentes pretensiones de novedad, al menos para Bolivia, que en esas épocas, en narrativa, seguía anclada en un realismo recalcitrante. Sin embargo, pocas veces uno se encuentra con una narrativa que quiere romper con los esquemas cronológicos y de univocidad, y al mismo tiempo se aferra a una simetría tan fanática y racional, anclada en una verosimilitud aristotélica, tal como sucede en Los fundadores...
Tal simetría estructural no puede sino hacer recuerdo de cierto aire marcial, cosa que es totalmente comprensible y hasta correspondiente con el tópico bélico de la guerrilla. Su orden puede ser comparado con una marcha militar no sólo en cuanto a la cadencia de la música, sino también a la coreografía de un desfile. A lo largo del texto se puede decir que primero aparece un narrador omnisciente, seguido del narrador personaje (narración en primera persona) de un soldado, luego vuelve el omnisciente para repetirse en el siguiente “capítulo” y la secuencia es finalizada por el narrador personaje otra vez. Tal cadena de la estructura después se repite. Lo mismo ocurre con el ordenamiento temporal del narrador en tercera persona que se focaliza en la Bilsdung Roman del personaje central, Javier. En esta parte de la narración, el tiempo se encuentra dislocado, pero dislocado con segmentos perfectamente iguales y paralelos, a veces de más de tres líneas narrativas  entrelazadas en este orden: se comienza por el final de un episodio, se retrocede a su principio, se narra lo que sucedió momentos antes de la conclusión de la acción con que se empezó el capítulo y se vuelve a momentos después del inicio del tiempo de la narración, luego se repite la coreografía. Es casi un calco de una secuencia de la música militar, con un redoble, paso de parada, paso de parada y redoble o, dicho visualmente, de un desfile militar con una escuadra de verde seguida por dos de azul y una de rojo al último, y que se repite hasta el final. 
Si cabe la posibilidad de imaginar un paralelo helénico de la descripción estructural realizada, sin lugar a dudas habría sido escrita en metros heroicos, narrando tal vez una incursión en Jonia del gran bárbaro, el persa Ciro y, quién sabe, entremezclándose también con el relato del romance de una humilde artesana de Tracia y un general de elevadas ideas pan-pérsicas de Pasargadas.
En Los Fundadores... no cabrían los yambos dionisiacos, el tema de la guerrilla es tratado muy seriamente, el humor no puede tocarlo, pues lo relativo a la guerrilla es muy sublime (si es que podría haber gradación en lo sublime) para que el humor se asome.
Este régimen estricto de la novela de Prada, tan atado a la verosimilitud y la seriedad con que trata su tópico, también puede verse en la construcción de sus personajes. Aristóteles en su Poética dice: los personajes elevados (reyes y guerreros) deben hablar en metros heroicos y de cosas “elevadas”, los personajes bajos (la plebe) deben hablar de asuntos digestivos o de más abajo. Prada obedece, pues sus guerrilleros discuten sobre la revolución y van más allá: la vida y la muerte los conflictúan; por contraparte, los soldados bolivianos que los combaten sólo hablan de prostitutas y sexo, en ellos no se admite nada más, si no dedican sus charlas a tal cosa, se les concede que expresen cuánto les incomoda el clima. Como si ellos no estarían lidiando también con la muerte cada momento, como si no lidiásemos todos con ella cada día.
Los fundadores del alba ya no emociona, cosa que en lo literario no importaría sustancialmente, lo complicado es que no termina de convencer, tal vez por eso cada vez hay menos gente que ha leído este libro.
Vida y obra de Prada
Renato Prada nació en Potosí en 1937, radicó desde 1976 en Xalapa, Veracruz, (México). Es autor de novelas como Los fundadores del alba, Larga hora, La vigilia, El último filo, Poco después humo; libros de cuento como Ya nadie espera al hombre, La noche con Orgalia, A través del hueco. También se dedicó a la teoría literaria con Análisis e interpretación del discurso narrativo-literario, Literatura y realidad, El discurso testimonio, Hermenéutica, símbolo y conjetura. Murió  en septiembre de este año.

lecturas
Bolivia: el 18 brumario del Kananchiri
Por Rafael Bautista S.
Cuando Zavaleta expone la “paradoja señorial”, no sólo describe la contradicción de una casta sino de toda una subjetividad que se expande al todo social: aquella que se constituye “en contra del indio”. Por eso produce un Estado aparente, porque no tiene contenido propio, porque lo propio es aquello que niega para poder afirmarse a sí mismo; porque es antinacional, su legitimidad tiende siempre a la nulidad. Por eso necesita de una sociedad, también aparente, que se haga a imagen y semejanza de ese Estado; ambos se corresponden, pues en ambos se encuentra arraigada una cuestión de fe. Por eso señala Zavaleta, sin miramiento alguno: “la única creencia ingénita e irrenunciable fue siempre el juramento de su superioridad sobre los indios, creencia en sí no negociable, con el liberalismo o sin él y aun con el marxismo o sin él”.
Vale la pena subrayar lo último. Porque incluso la asunción de banderas revolucionarias no supone la superación de esta creencia que es, como bien dice, “ingénita e irrenunciable”. Por eso se producen las recaídas. Por eso a la revolución del 52 le sucede la contrarrevolución y al actual “Estado plurinacional” le viene sucediendo la reposición del Estado colonial. La “paradoja” consiste en que la dirigencia gubernamental del proceso no logra reunir, ni las condiciones subjetivas ni las institucionales, para auto-transformarse, y menos, para hacer posible la transformación del Estado. Esta “paradoja” se sostiene porque aquella creencia permanece inamovible.
Por eso en el mismo discurso revolucionario anida esta “paradoja”: la dominación se reconstituye bajo nuevas banderas; porque si la creencia no es posible se ser superada, entonces los propios revolucionarios producen la contra-revolución. Por eso hasta la izquierda puede ser la nueva derecha. Porque a ambos les une una creencia también irrenunciable; principio nodal de un mundo que se globaliza desde la conquista, en contra, siempre, del indio.
Pueden renunciar a todo, menos a su fe ciega en el “progreso” moderno. La riqueza del mundo moderno les enceguece, de tal modo, que ya no tienen ojos para ver lo más evidente: que esa riqueza es sólo posible por la acumulación sistemática de miseria. Para que el primer mundo sea “desarrollado” tiene que producir el subdesarrollo del tercer mundo (para que haya centro tiene que haber periferia). La conquista no cesa y, con el añadido del racismo congénito moderno, se lo racionaliza hasta como un imperativo categórico: ahora se llama “desarrollo”.
La “paradoja” aparece en el dominado, cuando aspira a ser un nuevo dominador. Por eso el socialismo fracasa: critica la dominación del trabajo humano por el capital, pero la liberación del trabajo no libera al ser humano, pues sigue inamovible la dominación de la naturaleza. Y en eso consiste la Modernidad: en dominar. La “riqueza”, el “desarrollo” y el “progreso” modernos, son sólo posibles en términos de dominación. Las mercancías modernas que nos enceguecen y seducen, chorrean sangre humana y sangre de la Madre tierra, desde hace cinco siglos. La economía que promueve este famoso “desarrollo”, sólo sabe producir riqueza, destruyendo las dos únicas fuentes de riqueza: la humanidad y la naturaleza, Marx dixit. La crisis ecológica no es una maldición divina sino consecuencia de la irracionalidad de la racionalidad económica moderna; que comparten tanto capitalistas como socialistas.
Las creencias económicas modernas son también “ingénitas e irrenunciables”, y parten de una clasificación dicotómica que se origina en el mito fundacional del mundo moderno: el racismo. Las categorías de desarrollo-subdesarrollo, son emanaciones lógicas de la dicotomía inicial que legitima la conquista del Nuevo Mundo: superior-inferior. La naturalización de esta clasificación es el racismo. Por eso el indio aparece, en el Estado señorial-moderno-colonial, como obstáculo del “progreso” y el “desarrollo”. En nombre de estos se producen los genocidios a la humanidad y a la naturaleza, desde la conquista, la colonia y la república, y en nombre también de estos, ahora, un Estado plurinacional, lejos de proponerse un contenido propio, auténtico, liberador, no hace sino volver a su forma anterior, y de modo más acabado.
Por eso la “paradoja” continúa, y recompone lo que se pretendía superar. No hay verdadera transformación: quienes pudieron convertirse en los abanderados de un proceso de liberación, no saben ni pueden entenderse al margen de un Estado al que desprecian y, sin embargo, lo restituyen; porque las estructuras de ese Estado, estructuran su propia subjetividad. Parafraseando a Zavaleta: pudieron ser los conductores de un gran acto revolucionario; pero sus cabezas mismas, no eran libres todavía de aquel Estado.
El primer mito de la subjetividad moderna es la creencia en su superioridad. Es en la conquista, donde se constituye aquel mito; necesita constituir a la víctima en “inferior”, para legitimar su dominación: donde no hay indio No hay “señor”. Por eso las repúblicas nacen formalmente “independientes”, pero siguen siendo esencialmente coloniales. No pueden siquiera constituir nación, porque lo nacional mismo es excluido. La nación es clandestina, porque el Estado es colonial. Su soberanía es pura ficción; por eso se convierte en mero administrador de intereses que, ni siquiera, son los suyos.
En este contexto, la coyuntura crítica que atravesamos, revela el carácter constitutivo de un Estado, cuyo relevo de mando, no hace sino reponer ese carácter: el Estado boliviano, incluso con wiphala, no sabe constituirse sino siempre, “en contra y a costa del indio”. El MAS reedita al MNR; por eso no es raro el movimientismo de ambos y el nacionalismo, como ideología, que une ambos fracasos: modernizarnos a toda costa, o sea, “a costa siempre del indio”. Es un aborrecimiento que no tiene fin, Zavaleta dixit.
Incluso con marxismo, hasta con discurso de descolonización, el indio sigue siendo el obstáculo para modernizarnos. La conquista se actualiza: “siendo por naturaleza siervos los hombres bárbaros [indios], incultos e inhumanos, se niegan a admitir el imperio de los que son más prudentes, poderosos y perfectos que ellos; imperio que les traería grandísimas utilidades, siendo además cosa justa por derecho natural que la materia obedezca a la forma, al cuerpo al alma, el apetito a la razón, los brutos al hombre, la mujer al marido, lo imperfecto a lo perfecto, lo peor a lo mejor, para bien de todos”. Ginés de Sepúlveda resucita con rostro “plurinacional”, pero sigue diciendo lo mismo: el indio no puede ser sujeto sino objeto de la autoridad (quien es “más prudente y perfecta”). Él no puede reclamar derechos, es el Estado señorial-moderno-colonial quien se los otorga; por eso es considerado un “menor de edad”: “influenciado por ONG’s”, “usado por la derecha”, etc. Y si éste no tiene derechos, peor la naturaleza.
La modernidad mata a Dios para erigir a sus ídolos, nuevos fetiches hambrientos del sacrificio constante de la humanidad y la naturaleza. La riqueza moderna no tiene límites, por eso la economía se mide por cifras, siempre en aumento; por eso “progreso” significa, en definitiva, destrucción. La subjetividad que legitima ese “progreso”, no cree ni en su camisa, como Melgarejo. Son jacobinos. Si no creen en Dios, ¿cómo van a creen en la Pachamama? Sólo creen en su propio poder, por eso son soberbios. Por eso entienden la política como lucha por el poder: en lo único que creen es en el poder; por eso, cuando lo tienen, viven ello de modo hasta insensato. Por eso ya no escuchan, porque asaltan literalmente aquello que idolatran. El poder ya no es facultad propia del pueblo sino expropiación ilegítima de éste; por eso, cuando asaltan el poder, es un literal asalto del propio pueblo. En nombre del pueblo asaltan al propio pueblo.
Si hay alguna enfermedad infantil en la izquierda es su jacobinismo. Por eso hasta se interpretan, a sí mismos, bajo los códigos de la revolución francesa; por eso también la replican: a la revolución le sigue el reino del terror. Aquella revolución, que postula la “declaración de los derechos del hombre”, no sólo guillotina a la realeza sino también a los no considerados en tales derechos. Cuando mata a Babeuf y a Olympe de Goughes declara, que aquellos derechos, no son, en realidad, universales: los obreros y las mujeres están al margen. Son derechos exclusivos del ciudadano burgués. En consecuencia, la revolución de los “derechos del hombre”, en nombre de esos “derechos”, le hace la guerra a la primera nación de esclavos libres, Haití, y mata a su líder, Toussaint l’Overture.
El que, en este gobierno, alguien se declare jacobino y bolchevique no es casual. En abril de 2006, ya habíamos expuesto la contradicción que aparecía al interior del propio gobierno, en un artículo en internet: “El Asalto Jacobino del Gobierno del MAS”; donde decíamos: “El proyecto de nuestro vicepresidente siempre fue moderno. Su modelo de ‘capitalismo andino’ siempre buscó el desarrollo de las economías informal y tradicional desde la inocente asunción del patrón de acumulación capitalista (fiel al modelo ortodoxo de izquierda: ‘hay que cumplir las tareas que la burguesía dejó pendientes’). No dándose cuenta que tal proceso de acumulación está pensado a partir del desarrollo de los centros económicos, cuyo crecimiento depende de la postergación de las colonias; es decir, el supuesto ‘desarrollo’ está prescrito por un modelo que ha constituido al centro en eje del ‘desarrollo’, de este modo debe adoptarse un patrón de acumulación que acaba siempre postergando a la periferia, porque esa lógica consolida un sistema-mundo que ordena el mercado mundial en torno a la maximización económica del centro. Condición de la imposición de la economía capitalista en la periferia es la destrucción paulatina de sus economías tradicionales. El capitalismo no es sólo extracción de excedente; es, en primera instancia, des-estructuración de la economía tradicional y de la sociedad para re-ordenarlos en torno a la producción de excedente (exportadores de materias primas). O sea, la sociedad en torno a la producción de excedente es posible porque primeramente se destruye la base económica tradicional para hacerla dependiente de otro patrón de acumulación, en este caso, la maximización del capital. En tales condiciones no hay convivencia ‘normal’ de estas economías; una vive a costa de la otra, la competencia de capitales en la globalización es una lucha donde quien no acumula más valor muere, por ello la explotación en la periferia es más despiadada, porque la desigualdad tecnológica y la subordinación política (deuda e inversión extranjera) condena a los países pobres a transferir plusvalor extraordinario (explotación humana al infinito) al centro, siempre en ascenso. La tesis del ‘capitalismo andino’ buscaría intervenir en la economía tradicional para impulsar su ‘despegue’, o sea, a subsumirse en la lógica de acumulación capitalista. Esa es la falacia desarrollista: el único modelo a seguir es el seguido por Europa. Pero no es la economía informal y menos la economía tradicional las que imposibilitan el ‘desarrollo’. Es, más bien, el sector burgués de la economía el que arrastra a toda la sociedad al subdesarrollo; porque su existencia depende de la mantención de una estructura (nacional y mundial) que hace posible su dependencia sistemática. Por ello, el moderno-sistema-mundo corrompe a las elites de los países pobres para asegurar la estructura económica mundial; beneficia a sus elites a costa del subdesarrollo de sus sociedades, o sea, son ellas y la economía que patrocinan y ejercen la que arrastra a sus sociedades al subdesarrollo. Entonces, la intervención estructural debe hacerse a ese sector: el sector burgués. Para ello, son los principios (filosóficos, económicos y políticos) de la sociedad burguesa los que merecen el des-montaje y su re-consideración desde criterios ético-políticos de defensa de la reproducción de la vida de las víctimas (no del capital). La explotación despiadada de hombre y naturaleza es posible por una lógica que devalúa ambos a la condición de objeto. El sujeto que concibe esta lógica ha pasado del yo-conquisto al yo-pienso y al yo-domino. Se postula universal y portador absoluto de la verdad, devaluando todo pasado e imponiendo su proyecto (estar en la riqueza) como el adelante al que todos deben de someterse. Su libertad es libertad de propiedad, su propiedad es su derecho natural y su derecho es ley sobrehumana. Si estos principios no se ponen en suspenso, entonces todo proyecto, incluso los supuestamente alternativos, caerán en la reproducción de una lógica que, no en vano, lleva más de cinco siglos sofisticándose”.
Aquel “capitalismo andino”, ahora se llama “socialismo comunitario”. Pero el cambio de nombre no cambia su contenido: la fe ciega en el “progreso” moderno. En nombre del “progreso” se interpreta que toda oposición a éste es irracional, entonces, en nombre de “la razón”, se la elimina. En consecuencia, la creencia “señorial” se reafirma: el enemigo es el indio. El racismo desata una nueva “cruzada”. El Estado señorial-moderno-colonial se recompone. Que la derecha critique la represión a la marcha indígena en defensa del TIPNIS, es puro oportunismo, exclusivo cálculo político. Si ellos volviesen al poder, no sólo violarían el TIPNIS sino que lo ofrecerían, con indios y todo, de modo abierto, al capital transnacional, también en nombre del “progreso” y “la razón”; los ídolos a los cuales se postran hereditariamente.
Lo que hace el jacobinismo gubernamental es reponer la “paradoja señorial”. No logra reunir las condiciones subjetivas ni institucionales para hacer efectiva una real trasformación, porque no sabe ni puede enfrentar su propia subjetividad, presa de los prejuicios “señoriales” y modernos que le enajenan de su propia realidad. Y, en situación crítica, no halla mejor modo de descubrirse, que mostrarse en el más puro estilo colonial: la represión desnuda.
Si no hay transformación subjetiva, es imposible una transformación objetiva. Si no se produce al sujeto de la liberación, la liberación se queda como pura retórica y, de ese modo, el pueblo es reducido a la condición de objeto sumiso, apto para su dominación. Todo empieza con la segunda gestión gubernamental, cuando se arrasa con el 64% de la elección. La consigna fue ganar “como sea”; y ese “como sea”, fruto del cálculo político, empezó a carcomer una legitimidad ya contaminada (los advenedizos no tardaron en trepar y los dirigentes históricos tampoco se quedaron atrás); en las elecciones municipales, eso costó una merma electoral considerable. Ese cálculo interesado, típico en una lógica instrumental de la política, iba constatando que los nuevos actores gubernamentales no habían cambiado nada, pero pretendían dirigir el proceso de cambio.
Fundan entonces el Estado plurinacional sobre bases irreales; porque si ellos pretendían mostrarse como la dirección del proceso, presentándose como quienes ya saben el sentido de éste, entonces el pueblo estaba de más. La verdad era expropiada como patrimonio exclusivo del sector jacobino del gobierno; pues si se dice que el pueblo está equivocado, se quiere decir que el gobierno tiene la verdad. Por eso el presidente Evo ya no necesitaba escuchar. Por eso el sector jacobino podía prescindir del pueblo y direccionar el proceso de cambio al margen del propio pueblo, independiente de si le guste o no al pueblo el sentido que iba adquiriendo el proceso. Desde la visión autista y auto-referente de quien había expropiado, para sí, el ámbito de las decisiones, el proceso sería lo que su imaginación decidía.
Ya no es ningún secreto que, en esta segunda gestión, el presidente Evo había perdido la capacidad de decisión en aspectos vitales y que ésta había recaído en la segunda figura de gobierno. Por eso se entendía que, en los momentos críticos, como el gasolinazo, mientras el presidente estaba curiosamente fuera del país, quien daba la cara, era el vicepresidente. El mismo celo de los ministros, de recluir al presidente en un distanciamiento hasta penitente, mostraba que aquél acataba (no sabemos si entusiasta o resignado) lo que ya había sido dispuesto. Frente al panorama que le presentaba el círculo llamado q’ara, él no podía más que consentir todo aquello; por eso, como lección, no basta en un líder sólo la buena intención sino que precisa de una formación intelectual sostenida, para no quedar embaucado en la retórica hábil de sus interlocutores. Creía que su constitución sindical le bastaba, pero eso le está costando caer ya no sólo en los errores sino en una traición a todo aquello por lo cual había luchado. En política no puede haber inocencia.
El rechazo al gasolinazo no sirvió para la reflexión porque no se trataba de un error sino de una apuesta que, de modo consciente, había adoptado ya este gobierno, y que es la misma apuesta por la carretera que atraviesa el corazón del TIPNIS. La apuesta por el “desarrollo” moderno. Pero esa apuesta no es nuestra sino a costa nuestra. Y el indio es el testimonio viviente de lo que ocasiona esa apuesta. Humanidad y naturaleza quedan reducidas a simples medios para los fines del “progreso” moderno. Frente a aquél, nuestras culturas, tecnología, medicina, religión, conocimiento, ciencia y filosofía, no sirven, son obsoletas, atrasadas, premodernas. Lo único valioso es el “desarrollo” moderno.
La “paradoja” reafirma la tozudez colonial: asume como propio un ideal que no le corresponde y, en consecuencia, creyendo “desarrollarse”, no hace sino desarrollar a otros a costa siempre nuestra. La contradicción desarrollo-subdesarrollo, es una contradicción al interior de la lógica moderno-capitalista; si mi marco de interpretación de la realidad es sólo lo que la modernidad me muestra, entonces las transformaciones que pueda operar en ella ya no son tales sino simples reformas. Por eso el vicepresidente es etapista, porque se ha creído el cuento jacobino-bolchevique de que hay leyes fatales de la historia, a las cuales debe someterse el ser humano; por eso no sabe sino proponer metas cuantitativas a un asunto cualitativo: la transformación del mundo (los socialistas creyeron que la revolución era la culminación del “desarrollo”, cuando debieron comprenderla –si hubiesen sabido algo de la crítica de Marx–, más bien, como un freno al “desarrollo”, porque se trataba del “desarrollo” moderno-capitalista). Entonces, lo que se hace, ya no es cambiar al mundo sino afirmarlo del modo más contundente. Porque si persigo el “desarrollo” es que concibo mi realidad a partir de los criterios del “desarrollo” y, como no coinciden, entonces hago que mi realidad se comporte según los patones del “desarrollo”; es decir, de modo irreflexivo, argumento contra mí mismo, porque precisamente somos las víctimas de ese “desarrollo”, desde hace cinco siglos. El precio de ese “desarrollo” es la producción sistemática de miseria y la destrucción, cada vez más acelerada, de la naturaleza.
Ahora que las cosas, en esta coyuntura crítica, se muestran no como son en lo cotidiano sino como son verdaderamente, nos damos cuenta que la descolonización es algo mucho más que un discurso, y que el gobierno no tiene ni la más mínima idea de lo que significa descolonizar el Estado. Por eso, para pretender ser la vanguardia del proceso tienen que arrebatar ese lugar a la verdadera vanguardia. Por eso interviene el gobierno la marcha indígena en defensa del TIPNIS. Se trata de un rapto. Sólo pueden ser vanguardia, poniéndose ellos como vanguardia. El pueblo no los puso para que decidieran al margen del pueblo sino para que obedezcan las decisiones del pueblo. No viven el proceso pero pretenden dirigirlo, desde aquella “iluminación” que creen infalible.
El kananchiri había sido el sobrenombre intelectual del vicepresidente en su etapa insurgente. Desde la “guerra del agua” se puso de moda junto a otros “iluminados”, de una supuesta izquierda renovada. Esta izquierda nunca reflexionó sobre la colonialidad de sus categorías, al grado de adjetivar este proceso con una mixtura de conceptos que abrazaban sin criterio alguno, sólo porque estaban de moda o porque respondían a sus gustos estéticos. Para el vicepresidente el pueblo siempre fue “multitud”: una masa informe a la que había que dar forma. Relación sujeto-objeto. La “potencia plebeya” es sólo potencia en su sentido bruto, aristotélico digamos: es pura potencia, pero nunca acto; el objeto es pura potencia en sí, el acto es un añadido que le viene de afuera. Lo epistemológico precede a lo político. El conservadurismo ya era compromiso epistemológico, cuando se comprendía lo político desde el punto arquímedo de toda dominación: la relación sujeto-objeto deviene, en política, en la guerra por otros medios. La concepción de la cual se parte establece qué política, en definitiva, se sigue o se produce.
Por eso, cuando el vicepresidente se llamaba “el último jacobino” no era casual. Tampoco era casual que el presidente, ya en la primera gestión, decía convencido: “gobernar es hacer buenos negocios”. No en vano ambos coquetean ahora con el sector empresarial (para colmo con el más reaccionario: el ganadero y agroindustrial del oriente). La introducción de los transgénicos en la ley productiva es, entre otras cosas, una concesión al sector soyero exportador. Y el apoyo de ciertos colonizadores, cocaleros y hasta campesinos, a la nueva carretera, es una apuesta al “desarrollo”; todos ellos quieren ser empresarios privados. Por eso no les interesa afectar a la naturaleza, porque para el afán de riqueza, la tierra es puro recurso, objeto, cosa a explotar, en beneficio privado.
Por eso decíamos, la “paradoja” no es sólo de una casta sino que contamina al todo social. Por eso el nuevo “señor” no tiene necesariamente que provenir de la casta oligárquica sino hasta puede serlo un pobre y hasta un ex guerrillero insurgente. El poder no cambia a nadie, su único poder consiste en mostrar cómo uno es verdaderamente. Por eso no es nunca primero el líder, primero es siempre el pueblo; cuando éste actúa a la altura de lo que se propone, el líder emana de su propio seno. Pero actuar de ese modo, requiere que el pueblo se haga sujeto; de lo contrario, el poder delegado es raptado con la connivencia del propio pueblo. Por eso, para que exista dominación tiene que haber, también, un cierto grado de inocencia para que la dominación se haga posible.
Vaciada la legitimidad, hay que inventarla; si ya no hay hegemonía democrática, viene la dominación pura. Lo que, en codificación revolucionaria francesa quiere decir: el 18 brumario: el coup d’Etat. Si el pueblo es el equivocado entonces se justifica la represión que se le hace, y ésta es justa porque “se niegan a admitir el imperio de los que son más prudentes, poderosos y perfectos que ellos”. Ginés regresa sabiendo muy bien la lógica indígena; lo que se propone es una nueva “extirpación de idolatrías”. El respeto a la Madre tierra es la nueva “idolatría” que hay que extirpar, en nombre del verdadero ídolo: el “progreso” moderno. Si ya no hay legitimidad, el cálculo político opta por lo más funesto: generar las condiciones para la recaptura absoluta del poder.
El 18 brumario estaría precedido por la vertiginosa pérdida de legitimidad. Todavía se esperaba una última autocrítica, pero los ministros prefieren ser Pilatos y lavarse de toda responsabilidad. Hasta la wawa ministra mostró más dignidad que todos los tata ministros juntos (la renuncia de la ministra de Defensa declaraba, en un arrebato de lucidez, que es el gobierno el que posibilita un retorno de la derecha –si hay infiltrados, ¿no estarán en el propio gobierno?). 
El conflicto de Caranavi y el de Potosí, ya habían mostrado no sólo la inoperancia de los ministros sino, lo más grave, la soberbia y el desprecio –que van siempre juntos– que habían ido adquiriendo en el ch’aqui del poder. Ya se creían “señores”; igual que los hidalgos, como Cortez y Pizarro. El que se cree “señor” sin serlo, sólo sabe imponer su “señorío” a la fuerza. Es lo que les queda. Por eso, la intervención a la marcha no fue algo improvisado. El último discurso del presidente ratifica la decisión gubernamental de construir la carretera, sólo que se la aplaza. Se propone una discusión nacional al respecto, pero la discusión se la quiere reducir a lo técnico, cuando lo que está en juego es nuestra propia política de Estado. Porque las razones que arguye el vicepresidente (que curiosamente no apareció para nada) para dorar de magnanimidad al proyecto de la carretera son falaces: lo que supuestamente integra, ni siquiera vincula a todas las comunidades; el “desarrollo” que promete es desarrollo inmediato de ganaderos, expansión de su mercado, no de las comunidades; y, el argumento más colonial: cuando hace una historiografía de la carretera y señala que fue hasta propuesta en tiempos del Mariscal Sucre, olvida que esos propósitos eran paralelos a los propósitos de los nuevos conquistadores, que veían en el oriente una nueva reconquista.
El discurso no deja de ser “señorial” porque se aduce justicia social. Si una carretera fuera, en sí, sinónimo de “progreso”, entre La Paz y Oruro, todos los campesinos serían ricos. Ahora bien, que la OAS haya o no financiado al MAS, descubre que hay ciertos compromisos adquiridos que le están costando a este gobierno más de lo que suponía. Por eso no se trataba de ganar “como sea”; en ese “como sea” se estaba jugando con el diablo; por eso, el cálculo político es lo menos calculable, porque en política se trata con personas, no con cosas. Seguramente, desde la visión de gobierno, este conflicto no es más que otra de esas “tensiones creativas” que le gusta reiterar al vicepresidente, ¿cuál fase será ésta en su lectura matematizante del proceso?
Si no hay autocrítica, entonces se reafirma la posición jacobina: la revolución se hace al margen del pueblo: Robespierre condena a Dantón. Y el nuevo Saint Just que goza de más poder (pese a que su presencia influyó mucho en el fracaso de todos los “diálogos”; entre mudos –los indios– y sordos –los ministros–, porque ante la orden del sí o sí, no había razones en contra que valgan; cómplice anterior del recorte de los escaños indígenas en la nueva Asamblea plurinacional), completa el cuadro. ¿Qué decía Saint Just?: “ne pas de liberté pour les enemies de la liberté” (nada de libertad para los enemigos de la libertad). ¿Qué dijo hoy el ministro de la Presidencia?: “no hay más razón para marchas, el que lo haga, es que tiene afanes políticos”. No hace falta leer entre líneas lo que es una amenaza, secundada por el ministro de Gobierno (que sacrifica a su viceministro para quedar impune). Si los indios vuelven a la marcha, la amenaza ya ha sido clara. El cuco de la conspiración genera la reclusión en un gobierno que se vacía, paulatinamente, de opciones, y sólo opta por los llunq’us (los que trepan rápido, quienes se humillan antes para humillar después). En tales condiciones no hay mucho para escoger porque, además, quienes deciden no lo hacen ya por ética sino por puro cálculo político; los honestos son excluidos o arrinconados, viendo cómo el instrumento político reedita todo aquello que se criticaba.
Se esperaba, después de reprimir la marcha indígena, una vez más, un reencauce; lo que produjese una necesaria –y esperada– recomposición ministerial; pero si el presidente ya ha dejado de tomar la iniciativa, entonces se entiende que los ministros de la Presidencia y de Gobierno, enfrenten el conflicto desde una absoluta irresponsabilidad. A los “señores” no se les puede objetar nada. Por eso el conflicto no mengua sino se lo atiza más.
Después de dejar Cuba (para continuar la revolución en otros lados), el Che estaba escribiendo una crítica al Manual de Economía Política de la URSS; en el prólogo mencionaba que la crítica de Marx, no sólo que no fue comprendida sino que, en ese manual, se consagraban las aberraciones que condujeron al burocratismo y a la dictadura estalinista; que el sindicado de haber tergiversado el marxismo original era alguien por el cual sentía una profunda admiración, pero ello no impedía señalarle como responsable de la decadencia posterior: Vladimir Lenin. Cuando Marx decía a Engels que no vaya a pasarles a ellos lo mismo que a Hegel, indirectamente se refería a él; pues los primeros difamadores de las ideas revolucionarias son sus propios apologistas (los Judas salen siempre de entre los escogidos). Engels no comprendió a Marx y sus metidas de mano en “El Capital” son, en realidad, metidas de pata. Lenin ya es la culminación de una visión “científica positivista” del socialismo (lo mismo que Trotsky). Los marxistas rusos persiguieron a los llamados “populistas”, a quienes, curiosamente, apoyaba Marx. Hasta el maestro estaba equivocado. La “infalibilidad” jacobina no perdona nada.
Ahora los “infalibles” no perdonan disidencia alguna, les llaman “resentidos”, con ellos no habrá perdón. Por eso no queda otra; vaciada la legitimidad inicial, necesitan producir una nueva. Barrientos, siendo vicepresidente, le hace el golpe a Víctor Paz y, ¿cómo se legitima?, produciendo un nuevo pacto: el militar-campesino. Este pacto “señorial” es posible porque el campesino cooptado reniega de su condición india y se propone, como proyecto de vida, ser como el “señor”, es decir, se moderniza. Proyecto que abrazan ahora ciertos colonizadores y cocaleros, sobre todo. Por eso el MAS se recluye al Chapare. Todos ellos aspiran al famoso “desarrollo” moderno, por eso quieren la carretera, para expandir fronteras agrícolas y mercados para, en definitiva, generar más ganancias. Un nuevo pacto es posible y la sombra de Barrientos también anida en la Llajta, Cochabamba. La historia no tiene casualidades. El 18 brumario es una posibilidad que saborean los “iluminados”; por eso hasta le tienden la inocente trampa al canciller para justificar la agresión posterior (y él se presta a aquello).
Si el presidente no tiene ya iniciativa, otros la tienen. Se reproduce el síndrome Kennedy, lo que aquí sería el episodio de Siles Suazo: el propio sistema político se recompone al interior del gobierno. El “Estado señorial” cambia de forma pero no cambia en el fondo: cambia para no cambiar nada. Si ya no hay legitimidad y el propio presidente no da muestras de una recomposición urgente, entonces hay que inventarse legitimidad. El golpe ya no viene de afuera sino de adentro; así queda beatificada la misma oposición. El 18 brumario es un auto-golpe que se impone el cesarismo para preservar el orden y el sistema.
Reducir el conflicto a lo técnico es lo que no permite advertir todo lo que está en juego. Lo que destapa el TIPNIS es el proyecto tecnócrata que ha triunfado en el gobierno y ha rodeado el discurso de los derechos de la Madre tierra, haciendo imposible su realización como política de Estado. El gasolinazo fue una decisión tecnócrata que articula a los ministerios de Planificación, Economía y Hacienda, como lugar de recomposición de la estructura neoliberal. Que el vicepresidente dicte ese decreto, no es casual; como tampoco es casual que se rumoree un nuevo gasolinazo. El gobierno requiere de más ingresos, por seguir una política que le hace prisionero del capital externo (mantener la balanza fiscal también tiene que ver con equilibrar la deuda que se adquiere). La carretera por el TIPNIS es un acceso de capitales (no siempre nacionales) a la conexión bi-oceánica; la integración no es entre pueblos sino entre capitales. Pero el ingreso al corazón del TIPNIS tiene que ver con la exploración de lo que se supone hay allí. Es cierto que los cocaleros no tienen tanto poder para lograr el empecinamiento del propio presidente. Las razones hay que buscarlas en otro lado. En definitiva se trata de proyectos de vida. No dudamos que el gobierno tiene las mejores intenciones para su país; pero de buenas intenciones está lleno el camino al infierno. El petróleo, gas y otras riquezas que se hallan en el TIPNIS, supone una gran tentación; algo que la lógica instrumental ve sólo como utilidades. El asunto es: ¿cuál es el verdadero costo de esas utilidades, a la larga? Eso es algo que la racionalidad instrumental no sabe ni puede calcular; por eso suena, hasta risible, el que algún viceministro estime que el daño al TIPNIS será sólo del 0.3% (hasta por lo del efecto mariposa, la ciencia actual ya se cuida de hacer previsiones exactas).
El proyecto moderno abraza el “progreso” como una cuestión de fe. Se lanza a él sin importar los costos ni las consecuencias; en su adelante sólo existe la infinitud de un “progreso” que promete el cielo en la tierra. Es una tentación fáustica. Por eso hace del “progreso” su nuevo fetiche y le ofrece, a cambio del futuro prometido (que nunca llega), todos los sacrificios que le exige. Si el TIPNIS tiene riquezas entonces hay que conquistarlo; si los indios no lo hacen es porque son atrasados y salvajes, hay que enseñarles a ser civilizados, es decir, a aprovecharse de las riquezas, a explotarlas, para ser ricos. Pero, más allá de una visión moderna, el TIPNIS es algo más. Para ello precisamos desvelar nuestros ojos y trascender el reino de las apariencias.
Sólo habita lo espiritual en una relación armónica entre ser humano y naturaleza. Si toda la naturaleza es conquistada (violentada) entonces lo espiritual no tiene lugar. Así como el amanecer necesita de la oscuridad para nacer, así también necesitamos de lo desconocido para conocer; hay que preservar el misterio, la pachaMama es sujeto, es persona, necesita preservar su intimidad, como ser femenino que es. Lo otro es pura violación. No en vano Francis Bacon, describe así el método de la ciencia moderna: “debemos extraerle sus secretos a la naturaleza, así como el verdugo le saca la verdad a la víctima”. La Madre tiene lugares donde se recompone, adonde se retrae. Esos lugares se llaman sagrados y contienen el núcleo de espiritualidad desde donde el ser humano se recompone espiritualmente. Si desaparece eso, lo que desaparece, en última instancia, es el ser humano. Son lugares de energía ancestral, milenaria, que están allí, no para saquearlos sino para honrarlos. La medicina qulla conoce los efectos benéficos de un sinnúmero de plantas que se originan en lugares como el TIPNIS; hasta se dice que hay plantas medicinales aun no descubiertas y hasta alimentos nuevos (cosa que la tecnología moderna no puede hacer, sólo sabe alterar los alimentos, para generar ganancias, produciendo muerte). El TIPNIS es un lugar rico, no por lo que piensa la mentalidad moderna, sino por la vida que contiene.
Los guaraníes, cuando sienten que han empezado a producir relaciones de dominación, abandonan lo que han construido y se lanzan a un nuevo éxodo, en busca de “la tierra sin mal”; el concepto de “tierra sin mal” quiere decir: tierra no mellada por el hombre. Es decir, necesitan saber que hay una tierra virgen para saber que hay un mundo mejor. ¿Qué pasa si ya no hay más tierra virgen, que todo ya ha sido colonizado? Es el fin de la cultura (mito que comparten casi todas las culturas y naciones de Tierras Bajas y hasta de todo el continente; ¿será por eso que abandonan su civilización los tiwanakotas y los mayas?). Si se mata al TIPNIS, se mata también la cultura, es decir, la humanidad. El TIPNIS es sagrado porque la espiritualidad indígena encuentra allí uno de los núcleos de su emanación.
Pero a los jacobinos no les importa aquello; como no creen ni en su madre, menos van a creen en la pachaMama y menos que el Gran Espíritu habite en su interior. Sólo creen lo que ven y lo que ven son cifras: economía de los negocios, de la rentabilidad, de las ganancias. La vida les es algo demasiado abstracto para tomarlo siquiera en cuenta. Pero no se levanta impunemente lo sagrado. A los neoliberales no se les podía reclamar la defensa de la Madre, porque nunca se comprometieron con ella; pero el actual gobierno no sólo hace bandera de la pachaMama sino que se declara, frente al mundo, defensor de sus derechos. Entonces, dónde radica la aporía.
Volvemos a la “paradoja señorial”. El cacique Seattle decía que, para comprender al hombre blanco había que entrar en sus sueños y ver de qué están hechos. Los sueños del “señor” son lo que le impide una real liberación; si el siervo adopta esos sueños como suyos, entonces aprende a dominar, porque quiere ser también “señor”. No es una cuestión teórica sino existencial: pensar un nuevo proyecto no es tasar sus magnitudes o describir sus etapas; pensar un nuevo proyecto es producir al sujeto de ese proyecto, es decir, transformarse en sujeto. Pero no me hago sujeto haciendo objeto al otro. Sólo se es sujeto en relación a otro sujeto. Y si todo tiene alma, todo tiene vida. Por eso este nuestro momento es revolucionario, porque en el grito del sujeto están presentes los gritos de la pachaMama y de los achachilas, de las huacas y de los ajayus. Del Gran Espíritu, del Wirakocha. Por eso el “cambio” no podía adjetivarse con lo viejo sino que su propio lenguaje debe ser un lenguaje nuevo: sólo un nacido de nuevo puede proponer un lenguaje nuevo. Lo viejo es ahora lo moderno, lo que hay que dejar atrás y proponernos un nuevo mundo; no desde la nada sino desde lo nuestro. Por eso el pueblo no podía dormirse en sus laureles. Ahora que despierta, debe de reconocer que la vanguardia no está en los intelectuales, la vanguardia está en las naciones originarias, en lo indio que todos llevamos dentro, pero de manera negada y despreciada. Necesitamos preservar el TIPNIS, ya no sólo por razones ecologistas sino espirituales. Así como hay que preservar las apachetas, así hay que preservar el TIPNIS.
Cuando se dice que el enemigo está adentro, se dice que todavía no somos sujeto; porque seguimos escindidos, separados de lo más propio, desequilibrados, por eso hay conflicto al interior de uno mismo. Las contradicciones en el gobierno son también contradicciones en el propio pueblo; mientras nos proponemos un nuevo proyecto de vida, seguimos volteando la mirada para acabar como estatuas de sal. Quienes pretenden dirigir el proceso son los que se voltean y van sólo a lo conocido; se vuelven conservadores. El gobierno quiere, otra vez, salir de un nuevo fracaso del modo más inmaculado; el único cálculo que hacen, es que tienen que ganar, a como dé lugar. No están dispuestos a abandonar sus posiciones; por el contrario, ahora nos dicen, que son las condiciones y el propio pueblo, los que tienen que madurar, para estar a la altura de ellos. Por eso el 18 brumario es una carta que acarician. Ya hay tres renuncias; si fuera cierto de que el canciller se hace a un lado, ¿con quién se queda el presidente? ¿O es que el canciller ya estaba desplazado por el mismo Evo?
La Paz, Bolivia, 27 de septiembre de 2011
Rafael Bautista S.
Autor de “HACIA UNA FUNDAMENTACIÓN DEL PENSAMIENTO CRÍTICO”
rincón ediciones/ rafaelcorso@yahoo.com

www.chebolivia.org
Todo sobre Ernesto Che Guevara en Bolivia

Redactores:
La Paz: Marco Antonio Fernández Alanoca, Sulma Echaverría García, Isabel Pomier, Wilfredo Pomier Miranda y Juan Carlos Segales Limachi, José Julián Sirpatico. Cochabamba: Alonso Contreras Baspineiro, Fernando Méndez Terrazas y Claudia Zegarra Rivero. Santa Cruz: Alejandro Dausá. Oruro: Héctor A. Hinojosa Rodríguez. Sucre: Roberto Valdiviezo Luna. Potosí: Rosa Laime Muñoz. Trinidad: Emil Balcázar Lara. Madrid (España): Carlos M. Caravantes García.  
Sobre el Comandante de Nuestra América: www.chebolivia.org
De la Redacción:
Las notas firmadas expresan los criterios de los autores.


No hay comentarios:

Publicar un comentario